Almirall compra la cartera dermatológica de Allergan
La firma pagará hasta 561 millones para crecer en EE.UU.
El grupo farmacéutico Almirall anunció ayer la compra de una cartera de cinco productos de dermatología a la multinacional estadounidense Allergan, con una inversión de hasta 650 millones de dólares (561 millones de euros, al cambio actual).
La empresa propiedad de los hermanos Jorge y Antonio Gallardo informó ayer a la CNMV que el acuerdo prevé el pago inicial de 550 millones de dólares (475 millones de euros) y un pago futuro en función de las ventas de los productos adquiridos, que puede alcanzar los 100 millones de dólares adicionales (86 millones de euros), que habría de pagar en el primer trimestre del 2022.
Un portavoz de Almirall explicó ayer que la compra refuerza la estrategia del grupo de focalizarse en la dermatología (tras la compra, el 45% de sus ventas serán de esta especialidad) y de crecer en Estados Unidos, el primer mercado mundial de esta especialidad, que supondrá ya el 21% de sus ventas.
Con la compra, igualmente, la firma da un nuevo impulso a su filial americana Aqua Pharmaceuticals, tras la crisis sufrida en el 2017 por la salida al mercado de un genérico de su medicamento estrella, el Acticlate. Según Almirall, la incorporación de la nueva cartera de fármacos permitirá rentabilizar mejor su estructura local y ganar masa crítica de cara al lanzamiento del KX2-391, un nuevo medicamento para tratar la queratosis actínica que prevé lanzar en el 2021 y que le aportará unas ventas anuales de 250 millones de dólares.
La cartera adquirida por Almirall incluye “marcas maduras” para tratar el acné y la dermatosis (Aczone, Tazorac, Azelex y Cordran), que generan anualmente unas ventas de más de 120 millones de euros, así como un nuevo antibiótico para tratar el acné, denominado Seysara, que prevé obtener la aprobación de la FDA a finales de año y que podría generar al grupo unas ventas anuales de unos 173 millones de euros.
Por ello, explicó Almirall, la compra permitirá aumentar los ingresos del grupo y el beneficio por acción ya el año que viene, además de impulsar su crecimiento a medio y largo plazo .
Almirall explicó ayer que prevé cerrar la compra en el cuarto trimestre del 2018, cuando obtenga la autorización de las autoridades de la competencia de EE.UU. El grupo llevaba varios años estudiando compras para crecer en dermatología en Estados Unidos, y fue uno de los candidatos a adquirir la unidad mundial de productos de prescripción de Bayer, que finalmente consiguió Leo Pharma. La compañía ha financiado la compra con su propia caja y con líneas de crédito no dispuestas, así como con un crédito puente del BBVA y Banco de Santander.
El grupo tuvo unos ingresos totales de 398,3 millones de euros en el primer semestre, un 5,1% más que en el mismo semestre del año anterior, con un resultado bruto de explotación (ebitda) de 105 millones de euros, que creció un 80% y un beneficio neto de 52 millones.
Con la compra, el grupo realizará el 45% de sus ventas en dermatología y el 21% en Estados Unidos