La crisis de Argentina impacta en la bolsa europea
El Ibex acaba agosto con una corrección del 4% por la incertidumbre del peso
Del color albiceleste al rojo. El descalabro del peso argentino golpeó ayer a las bolsas. La incertidumbre que reina en la tercera economía de Sudamérica causó un revuelo en los parquets europeos.
El Ibex, tras el recorte (-0,72%) de ayer, dejó atrás un mes de agosto casi otoñal: un retroceso mensual del 4%, el tercer peor mes del año. En Europa, el Eurostoxx (-1,18%) y el Dax (-1,04%) alemán también marcaron pérdidas.
El gobierno de Mauricio Macri está intentando por todos los medios de corregir la caída de su divisa respecto al dólar, un 20% en 48 horas. Después de que el Banco Central Argentino subiera el pasado jueves los tipos de interés al 60%, el máximo mundial, el peso siguió cayendo. Ayer el tipo de cambio se estabilizó (en 37 pesos por un billete verde) gracias también a la intervención
DESPLOME CAMBIARIO
El Ejecutivo lanzará medidas para atacar el déficit y paliar el declive de la divisa
de la autoridad monetaria en el mercado, pero la situación sigue crítica.
“El ajuste rápido será doloroso, la recesión puede ser profunda y el riesgo político aumentará, con una confianza doméstica menguante”, declaraba Fiona Mackie, directora de Latinoamérica de la consultora Economist Intelligence Unit. Mauricio Macri, que llegó a la Casa Rosada con un programa liberal business friendly, dirigido a atraer las inversiones extranjeras y a dinamizar la economía, se encuentra de repente en una coyuntura que recuerda aquellas que se vivieron en Argentina a principio de este siglo con los gobiernos de corte más estatalista.
Sin embargo, ha quedado evidente que sus planes fracasaron, porque la inflación se ha disparado hasta el 30%, el doble de lo previsto y el crecimiento este año será negativo (-1%, según el Gobierno). La apreciación del billete verde ante la progresiva retirada de estímulos de la Fed, que tanta incertidumbre está causando en las economías emergentes con elevada deuda externa (Turquía, Sudáfrica) ha sido la guinda del pastel
“Con un alto nivel de endeudamiento, su plan no estaba equipado para hacer frentes a choques externos, tal como la subida de los tipos de interés y la apreciación del dólar. A finales del 2017 no parecía que ninguno de estos riesgos tuviera una alta probabilidad que se manifestaran”, dijo Gregorio Saichin de Allianz Global Investors.
Luis Torra, analista financiero, profesor de Esade y estudioso del pensamiento económico liberal recurre a esta metáfora. “Es como cuando de repente llega una nevada inesperada. Los copos están en las ramas, pero si el tronco está podrido, el árbol no se aguanta”. En este sentido, Macri paga también unas debilidades acumuladas que vienen de lejos. “Durante años los distintos gobiernos en el país han erosionado la clase media argentina con medidas de austeridad. Además hay dificultades tremenda para montar empresas y al final Macri se ha dado contra un muro”, agrega.
Ahora bien, el mandatario argentino tiene sus responsabilidades. Hace tres días dijo que había solicitado un adelanto del préstamo del Fondo Monetario Internacional (FMI), pactado en 50.000 millones de dólares. Un mensaje que, si quería tranquilizar los ánimos, obtuvo el efecto contrario, con una desplome del peso. En su editorial el Financial Times ayer le recomendaba a Macri que en el futuro “tuviera una estrategia de comunicación más sabia”. Pero el daño ya está hecho.
El pecado original es la deuda del país, contraída en dólares. Desde que el país volviera al mercado hace dos años, emitió bonos para financiarse, primero por un valor de 16.000 millones de dólares y luego el célebre bono centenario, por otros 2.750 millones. El problema es que el endeudamiento del país se ha disparado, del 50% del 2016 hasta el 75% este año. Una losa que pesa. El año que viene Argentina debe devolver el equivalente de 25.000 millones de dólares... pero en pesos.
El FMI salió ayer en un comunicado a calmar los ánimos, entre otras cosas porque hay cierta química entre su directora, Christine Lagarde y el mismo Mauricio Macri. “Argentina cuenta con el pleno respaldo del Fondo y confiamos en que el fuerte compromiso y la determinación de las autoridades argentinas ayudarán al país a superar las dificultades actuales”, afirmaron fuentes del organismo. “El personal del FMI y las autoridades argentinas han estado trabajando estrechamente para fortalecer el acuerdo a la luz de la reciente evolución de los mercados”, agregaron.
El ministro de Economía, Nicolás Dujovne, ha anunciado que pondrá en marcha medidas para atacar el déficit (hasta el 1,3% del PIB en el 2019) y devolver así estabilidad en el mercado. Porque los recuerdos del corralito son una sombra lejana, pero que nadie ha olvidado todavía.