Una mejor salud para las mujeres, una salud mejor para todos
La Generalitat impulsa la perspectiva de género en las políticas de salud para combatir las desigualdades en el estado de salud que se dan entre hombres y mujeres en Catalunya
Uno de los principales objetivos del Departament de Salut de la Generalitat es garantizar la igualdad de oportunidades para alcanzar el mejor estado de salud y de bienestar posible para cada persona. En este estado de salud influye el entorno socioeconómico o el territorio donde se vive, pero también si se es mujer u hombre. Y es que, aparte de que la salud entre mujeres y hombres es diferente por razones biológicas, también es desigual por factores sociales que establecen diferencias injustas y evitables en la salud de ambos sexos.
HÁBITOS MÁS SALUDABLES
En suma, en Catalunya las mujeres viven 5,3 años más que los hombres, pero con menos calidad de vida. Las mujeres tienen Impulsar la perspectiva de género en el ámbito de la salud es una necesidad social y es de justicia unos hábitos más saludables que los hombres, pero peor percepción de su estado de salud y de su calidad de vida relacionada con la salud, según los resultados de la última Encuesta de Salud de Catalunya 2017. La misma demuestra que las mujeres fuman menos que los hombres (18,5% frente al 29,7%); tienen un consumo de riesgo de alcohol menor (1,5% frente al 5,4%), y siguen más la dieta mediterránea (65,3% frente al 56,6%). Pero a pesar de estos comportamientos más saludables tienen una prevalencia más alta de problemas crónicos y discapacitantes.
Por ello, el Departament de Salut ha decidido impulsar la perspectiva de género en las políticas de salud, haciéndola indispensable e inseparable a la hora de planificar, aplicar y evaluar todas las políticas que se hacen y se harán. Porque es una necesidad social y porque es de justicia; porque una salud neutra al género no es más que una salud ciega a la realidad; porque combatir las desigualdades de género mejora la salud de las mujeres. Una salud mejor para las mujeres es una salud mejor para todos.
Por un lado, identificar las causas y las patologías más prevalentes en las mujeres –sobre todo las dolorosas y discapacitantes– es un reto para reducir las desigualdades en salud entre hombres y mujeres. Por otro, las políticas públicas deben buscar estrategias para garantizar la igualdad de oportunidades en los resultados en salud, y no sólo en el acceso a los servicios. Esto
Las mujeres tienen comportamientos más saludables y viven
5,3 años más que los hombres, pero lo hacen con menos calidad de vida La esperanza de vida en buena salud es inferior en las mujeres: 79,6% frente a un 84,7% en los hombres
justifica hacer intervenciones diferenciadas para hombres y mujeres.
Uno de los mejores ejemplos será el próximo Modelo de Atención a la Endometriosis. Esta enfermedad –que sólo afecta a las mujeres y que causa un dolor que limita mucho la calidad de vida– suele ser diagnosticada con años de retraso, dado, en parte, a la normalización de la aceptación del dolor durante la menstruación. Este nuevo modelo pondrá las bases para ordenar los servicios asistenciales que atienden a las mujeres con endometriosis, incluyendo aspectos clínicos, asistenciales y de ordenación de circuitos.