Putin da gas y apoyo a Orbán
Al primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, no sólo le interesa la amistad del presidente ruso, Vladímir Putin. También quiere su gas. Ambos dirigentes mostraron ayer sintonía en el Kremlin, donde Putin otorgó a su invitado el título de “socio clave en Europa”, más que un honor una necesidad por los contenciosos que ambos tienen con la UE. Orbán logró llevarse a Hungría un acuerdo sobre el suministro de gas para el 2020, según explicó en la rueda de prensa posterior. Además, logró arrancar a Putin una medio promesa, ya que el presidente ruso dijo que un tramo terrestre del gasoducto Turk Stream podría pasar por territorio húngaro. Esta proyecto, que reemplaza al cancelado South Stream y está actualmente en construcción, prevé el tendido de dos tuberías por el mar Negro entre Rusia y Turquía. Pero Putin lo dijo en condicional, así que todo dependerá de negociaciones futuras y de si Budapest y Moscú siguen estando en sintonía. Esa sintonía se apreció ayer en algunas declaraciones de Putin. El presidente ruso sugirió que la UE debe tomar una decisión política para resolver la cuestión migratoria, que actualmente enfrenta a Orbán con Bruselas. Putin puso el ejemplo de Rusia, que recibe inmigrantes sobre todo de las ex repúblicas soviéticas. “En la mayoría de los casos hablan ruso, entienden nuestra cultura y se adaptan más fácilmente”, dijo.