Corredor mediterráneo
ES una gran noticia, y un hecho determinante para el progreso económico del país, que el corredor mediterráneo, que debe unir Algeciras con Francia por ferrocarril con ancho de vía europeo, tenga licitados y en fase de ejecución todas los tramos que lo componen. Hay que hacer votos para que esta promesa, anunciada ayer en Barcelona por el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, sea una realidad, ya que son muchas las decepciones, en forma de retrasos, que acumula la marcha de este proyecto tan estratégico.
El corredor mediterráneo, según el ministro de Fomento, se encuentra ya en su recta final y confía que en tres años puedan agilizarse todos los procesos para que las obras sean una realidad completa. Hará falta un gran esfuerzo de las administraciones públicas para que eso pueda ser así, ya que por el momento, pese a todo, es todavía un proyecto incompleto en muchos de sus tramos. Ábalos aseguró que se está llevando a cabo un importante impulso técnico para acabarla obra después de que el financiero ya está cubierto, lo que permite intuir que hay luz al final del túnel.
El compromiso de Ábalos fue muy bien acogido por los líderes políticos y empresariales de Murcia, Valencia y Catalunya reunidos ayer en un gran acto público en Barcelona para reivindicar esta infraestructura, que es clave para desarrollar el máximo potencial económico del litoral español, donde se genera cerca de la mitad del producto interior bruto del país.
Dada la importancia que el corredor mediterráneo tiene para Catalunya, y en especial por sus previstas conexiones con los puertos de Barcelona y Tarragona, que aún están por concretar, sorprendió la ausencia del presidente de la Generalitat de Catalunya, Quim Torra. Sí estuvieron presentes, en cambio, los presidentes de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, y de Murcia, Fernando López Miras.
Es muy importante también el compromiso adquirido por el ministro de Fomento para que el corredor mediterráneo no acabe sólo en la frontera con Francia sino que pueda conectar con los grandes corredores ferroviarios europeos, para lo cual el Gobierno trabaja ya conjuntamente con el francés. Igualmente importante es el llamamiento que ha realizado Ábalos a los empresarios para que empiecen a plantearse ya desde ahora mismo cómo sacar el máximo rendimiento al corredor mediterráneo y a las grandes inversiones realizadas en él. No cabe duda de que eso será así, ya que han sido los empresarios de Catalunya, Valencia, Murcia y Andalucía los que llevan largos años unidos para reivindicar esta infraestructura, como se demostró también en el acto de ayer, por su importancia para la competitividad, la cohesión y la movilidad del país.
El corredor ferroviario mediterráneo de ancho europeo, con un trazado de 1.300 kilómetros, desde el puerto de Algeciras hasta la frontera España-Francia por Portbou, ofrecerá una eficiente salida exportadora hacia el resto de Europa y una sustancial mejora medioambiental, en la medida que reducirá el tráfico de camiones. A este eje, además, deben tener acceso los puertos de Huelva, Cádiz, Sevilla, Algeciras, Málaga, Motril, Almería, Carboneras, Cartagena, Alicante, València, Sagunt, Castellón, Tarragona y Barcelona, que, unidos en red, pueden captar además una parte sustantiva del flujo de mercancías que llegan desde Oriente por Suez y que se dirigen al potente sistema portuario Rotterdam-Rin. Sin ninguna duda puede afirmarse que el corredor mediterráneo, considerado por Bruselas como una red europea estratégica, es la obra de infraestructura que actualmente mayor progreso económico puede aportar al conjunto del país.