Reactivar el comercio barcelonés
IMPORTANTE aviso es el que ha realizado Barcelona Oberta, la asociación que engloba a dieciocho ejes comerciales turísticos de la ciudad, para reclamar la necesidad de defender el modelo comercial barcelonés, ya que en los últimos años se acusa un descenso de visitantes hacia el centro urbano. Según las conclusiones de un estudio presentado ayer, hay que poner en marcha nuevas estrategias para atraer compradores y compras por valor de 3.000 millones de euros.
El citado estudio indica que la afluencia de visitantes a los principales ejes comerciales de Barcelona ha caído un 4,3% desde hace cinco años. En el centro de la ciudad, en especial, las visitas de los residentes han disminuido un 8,7% y las de los que viven fuera de la capital catalana lo han hecho en un 5,6%. Esta caída se compensa, en parte, gracias al incremento de la afluencia de visitantes extranjeros, que ha aumentado sensiblemente en algunas zonas, como el Portal de l’Àngel; la plaza Catalunya y el Triangle; la rambla Catalunya, el paseo de Gràcia y El Corte Inglés.
El modelo comercial de Barcelona necesita potenciarse con un mayor número de visitantes para mejorar sus ventas ya que, entre otras cosas, sus costes de mantenimiento han aumentado por la fuerte subida (de un 25%) que han registrado los alquileres. El estudio advierte que un 15% de los comercios debería cerrar si su facturación cayese un 20%, lo que supondría la desaparición de 1.300 empresas y la destrucción de 7.000 puestos de trabajo.
El descenso de visitantes al centro comercial de la ciudad puede ser atribuible, según se desprende del citado estudio, a la competencia de las ventas a través de internet, que cada vez es mayor, y a las dificultades de acceso con el vehículo privado. Para atraer más compradores, además de mejorar las estrategias de venta por internet –que sólo utiliza el 34% de los comercios–, la citada asociación plantea reactivar una vieja reivindicación de una parte del comercio barcelonés: la apertura en domingos y días festivos. Así se pronuncia, al menos, el 67% de los encuestados por el citado estudio.
La propuesta que nuevamente hace Barcelona Oberta, para mejorar la situación, es abrir todos los domingos desde Semana Santa hasta Todos los Santos, ya que a partir de noviembre ya figuran los fijados por la Generalitat. Pero, a pesar de que pueda ser necesario, como reconoce la propia asociación, ello será difícil de conseguir si no se logra un consenso de todo el sector comercial para abordar dicha apertura en festivos de forma gradual. Lo que es evidente, en cualquier caso, es que a la vista de los datos aportados se hace necesario adoptar medidas eficientes para reactivar el acceso de compradores al centro de la ciudad y defender el modelo de Barcelona como ciudad comercial.