El Gobierno navarro ve machistas letras de Shakira, Amaral o Juanes
Una actividad para analizar en las aulas navarras “el sexismo y la violencia machista que transmiten algunas de las canciones que más escuchan” los adolescentes ha levantado una polvareda. Bajo el nombre de No me cantes violencias, la propuesta del programa del Gobierno foral para la igualdad Skolae, dirigida a jóvenes de entre 12 y 16 años, ha abierto una amplia polémica al señalar temas como Sin ti no soy nada (Amaral), Tenía tanto que darte (Nena Daconte) o Me enamora (Juanes) como “machistas”.
“Pensar que el reggaeton es el tipo de música más sexista en estos momentos es un error, ya que en los distintos estilos también aparece este machismo”, reza la introducción de la actividad, que divide las canciones en tres listas: las que “promueven violencia de género”, las que la denuncian y las que fomentan el “sexismo”. En la primera categoría, se encuadran Cuatro babys (Maluma), Toda (Malú), Picky Picky (Joe Montana) o La mataré (Loquillo y los Trogloditas).
El tema de El Loco ilustra el debate en torno al programa del Ejecutivo, censurado en muchos de los casos por interpretar literalmente un trabajo artístico que, precisamente, por su naturaleza, puede querer decir lo contrario.
El compositor de La mataré (1987), el guitarrista Sabino Méndez, ya salió el pasado año en defensa de una canción que definió como “una de las primeras denuncias del rock español contra el maltrato” y para cuya creación, explicó, se metió en la “mente de un maltratador” mostrando un “cuadro de des equilibrio emocional ”donde la mujer es la parte “centrada y fuerte” mientras el hombre es “incapaz de controlar sus emociones, desembocando en violencia”.
Dentro de la lista de obras que según la actividad promueven el sexismo, destacan Sin ti no soy nada
(Amaral), Un violinista en tu tejado (Melendi), Te espero sentada (Shakira), Tenía tanto que darte (Nena Daconte) y Contigo (El Canto del Loco). De nuevo, las críticas se centran en los límites del arte y la comprensión de las letras. Eva Amaral, sobre su propio tema, indicó que este habla de un momento de “dependencia emocional” pero que “para nada se ensalza ese tipo de relación”. El dúo zaragozano tiene otro trabajo en No me cantes violencias. Se trata de Salir corriendo, que se encuadra junto a Ella y Malo
(Bebe), Un extraño en mi bañera
(Ana Belén) o El final del cuento de hadas (El Chojín) entre las “canciones que denuncian la violencia de género”.