El PSOE ganaría en Andalucía y PP, Cs y Podemos sellan un triple empate
La encuesta del CIS da hasta 47 escaños a Díaz y 20 a cada uno de sus rivales
El PSOE ganará las elecciones andaluzas del próximo 2 de diciembre. Lo dicen todos los sondeos y también el del CIS, que ayer difundió su encuesta, realizada sobre una muestra de casi 5.000 entrevistas. La incógnita es si los socialistas obtendrán más del 37% de los votos –como afirma el sondeo del instituto público, que le adjudica incluso dos puntos más que en el 2015– o caerán al 30%, como indica alguna otra encuesta (mientras que la media de las difundidas hasta ayer sitúa a los socialistas entre el 32% y el 34%, y en torno a 40 escaños). Por si acaso, el CIS incluyó ayer una nota metodológica de una extensión inusitada y en la que subraya que ha incluido el “modelo estándar” (la coloquialmente llamada cocina )ala hora de elaborar la estimación.
En cualquier caso, el voto estimado para el resto de formaciones políticas dibuja un panorama igualmente inédito. El PP perdería más de ocho puntos con respecto a su resultado del 2015 (y se quedaría en el 18,7%); Ciudadanos sumaría más de nueve (18,5%), y la confluencia de Podemos e IU (Adelante Andalucía) cedería más de dos puntos (19,3%). Y además, la ultraderecha de Vox entraría en el reparto de escaños, con más del 3% de los votos.
Traducidos en diputados, esos porcentajes de voto supondrían entre 45 y 47 escaños para el PSOE (que ahora tiene 47); entre 20 y 22 para PP y Cs (33 y nueve, respectivamente, en el 2015), y en torno a 20 para Podemos (los mismos que suman hoy por separado la formación de Iglesias e IU). Es decir, según el CIS, a Díaz le bastaría con la abstención de Adelante Andalucía para repetir en la presidencia, ya que las fuerzas del centro a la derecha difícilmente sumarían más de 44 diputados en una Cámara de 109. Ciertamente, el sondeo del CIS es, de los publicados hasta ahora, el que otorga un respaldo más bajo al PP, aunque no a Cs ni a la franquicia andaluza de Podemos.
El resto de indicadores del sondeo no ofrecen pistas concluyentes sobre estos pronósticos. Es verdad que Díaz y su partido son los preferidos –con más de un 25% de menciones y a gran distancia del resto– para seguir al frente de la Junta. Pero los restantes números no son tan positivos para los socialistas. Por ejemplo, Díaz es la líder mejor puntuada, pero apenas supera una nota de 4, mientras el resto de candidatos se mueven en torno al tres y medio (salvo el popular Moreno que cae al 3,1). De hecho, entre sus respectivos votantes, Díaz cosecha un 5,9, pero su principal competidora por la izquierda, Teresa Rodríguez,
La gran novedad, junto al alza de Cs, que atrapa a los populares, es la irrupción de Vox, que entraría por Almería
obtiene un 6,4 (y un 5,6 Moreno).
Además, sólo un 11% de los consultados juzgan favorablemente la gestión del Gobierno andaluz (y algo más del 15% la de la propia Díaz). En cambio, más del 43% emiten un juicio negativo de la actuación de la presidenta y su Gobierno, mientras que alrededor de un 35% la califican de “regular”. Es decir, una valoración ambivalente y bien lejos del entusiasmo, ya que incluso entre los votantes socialistas las opiniones positivas sobre Díaz y su Gobierno alcanzan respectivamente a un 33% y a un 24% de ellos (y entre el 40% y el 50% la consideran regular).
Finalmente, predominan las opiniones negativas (más del 55%) sobre la situación política y económica de Andalucía. Y a la hora de señalar el principal problema, aparecen el paro (63% de menciones), la corrupción (15%) y la sanidad (8%). Eso sí, en la fase final del juicio de los ERE, la corrupción sólo es mencionada como primer problema por un 20% de los votantes del PP o Cs y por el 17% de los de Podemos.