Trump dice sin pruebas que hay gente que se disfrazó para votar dos veces
El recuento de los votos de dos candidaturas electorales clave en Florida ha dado la oportunidad perfecta a Donald Trump y algunos políticos republicanos para, sin prueba alguna, seguir sembrando dudas sobre la fiabilidad del sistema electoral. “Hay gente que se pone en la fila que no tiene ningún derecho a votar... A veces van al coche, se ponen un gorro u otra camiseta, vuelven y votan otra vez. Y nadie hace nada. Realmente es una desgracia lo que está ocurriendo”, declaró ayer a The Daily Caller, una web conservadora de noticias y opinión.
A pesar de que diferentes estudios e investigaciones independientes han concluido que los casos de posible fraude son marginales e insignificantes, Trump –como candidato y ahora como presidente– sigue ahondando en la idea de que si los republicanos pierden las elecciones en algunos estados, en especial en California y Florida, es como consecuencia del fraude electoral orquestado por los demócratas. “Hasta para comprar cereales tienes [que presentar] un documento de identificación”, proclamó falsamente Trump en la misma entrevista para defender la puesta en marcha de un carnet de votante, una medida que dificultaría aún más el ejercicio del derecho de voto a los colectivos más desfavorecidos o a los jóvenes.
Diez días después de la celebración de las elecciones legislativas, el Florida debía hacer público anoche el resultado del recuento de las candidaturas al Senado y al puesto de gobernador, que finalmente se tendrán que hacer a mano. El proceso se vio ralentizado por averías en las máquinas que computan las papeletas y los recursos judiciales para impedir la invalidación de miles de votos por divergencias con las firmas, un problema cada condado abordó a su manera. “Somos el hazmerreír del mundo elección tras elección y aun así no lo arreglamos”, lamentó el juez federal Mark Walker.
El plazo era susceptible de ampliarse por retrasos del condado de Palm Beach y posibles fallos judiciales. El senador demócrata Bill Nelson, aspirante a la reelección, ha denunciado como “inconstitucionales” las reglas de invalidación de papeletas y la negativa de ciertos condados a contabilizar el voto por correo que llegó pasadas las elecciones. Los primeros resultados dieron la victoria a su rival republicano, Rick Scott, por 12.500 votos, dentro del margen legal para realizar automáticamente un recuento. Respecto al puesto de gobernador, el demócrata Andrew Gillum concedió la victoria al republicano Ron DeSantis la noche electoral, pero al final la ventaja fue de sólo el 0,41% de los votos, de ahí el recuento.
“Somos el hazmerreír del mundo”, dice un juez federal antes de saberse que el recuento se hará a mano