El PSC ofrece a Torra un plan para empezar a “construir consensos”
La mesa de diálogo de los partidos catalanes arranca con la ausencia de Cs, PP y CUP
La mesa de diálogo entre los partidos catalanes, impulsada por el PSC y convocada por Quim Torra en el Palau de la Generalitat como un “espacio de diálogo”, arranca hoy con el doble hándicap de la ausencia de tres de las formaciones presentes en el Parlament –Ciudadanos, PP y la CUP– y de las diferencias que separan a las restantes –JxCat, ERC, el propio PSC y Catalunya en Comú Podem– sobre cómo abordar la crisis catalana, pero con voluntad de abrir una nueva etapa que tenga cierta continuidad.
Pese a unas ausencias que desvirtúan algo este primer encuentro y a las declaraciones del presidente de la Generalitat descalificando la posibilidad de un nuevo Estatut como “pantalla pasada”, los socialistas catalanes acuden a la cita con la voluntad de “fortalecer la convivencia, recuperar los consensos y avanzar en el autogobierno”. El PSC entregó ayer a Torra y a los portavoces de los partidos un extenso documento de trabajo, con una relación de propuestas que van desde una reforma constitucional en clave federal hasta un nuevo Estatut e incluso una propuesta para mejorar la agencia tributaria catalana.
“El consenso habrá que construirlo con personas que pensamos diferente, sin diálogo no hay solución, conviene empezar aunque la situación es compleja”, afirmó en rueda de prensa en el Parlament Miquel Iceta, primer secretario del PSC, junto al líder de Units, Ramon Espadaler. La voluntad de los socialistas, remarcó, es la de ofrecer soluciones a un Govern que ven “desorientado y divido” y contribuir así a “superar esta encrucijada con posibles espacios de acuerdo”.
El documento del PSC-Units se vertebra sobre seis ejes: 1) asegurar la convivencia, el pluralismo en el espacio público y la neutralidad de las instituciones; 2) garantizar el respeto a la legalidad y al actual marco institucional hasta que no haya el necesario consenso para reformarlo a través de los mecanismos y las mayorías establecidas; 3) desbloquear las instituciones, evitar erosionarlas creando organismos paralelos y rehacer consensos (calculan que hasta treinta órganos estatutarios están a la espera de su renovación, entre ellos el Consell de Garanties Estatutàries, el CAC y la Sindicatura de Comptes); 4) priorizar el desarrollo económico, la igualdad de oportunidades y el combate contra la pobreza y la exclusión social; 5) abrir un debate sobre la mejor manera de fortalecer el autogobierno y mejorar la financiapuestas ción, y sobre los procedimientos para acreditar un apoyo ciudadano mayoritario al acuerdo al que se llegue; 6) profundizar en el diálogo con el Gobierno de España para avanzar en la resolución de problemas pendientes.
Con todo, Iceta afirmó que no es bueno engañarse ni crear falsas expectativas y abogó por avanzar poco a poco. “Hay temas concretos, como ha quedado patente en las resoluciones parlamentarias aprobadas por unanimidad, que demuestran que se puede llegar a acuerdos puntuales”, señaló.
Catalunya en Comú Podem llevará al encuentro una serie de pro- destinadas a buscar “un nuevo consenso” que permita superar la existencia de los dos bloques en los que, consideran, se ha divido Catalunya a raíz del proceso independentista. La presidenta del grupo en el Parlament, Jéssica Albiach, y la portavoz, Susanna Segovia, serán las responsables de exponer este objetivo ante Torra, además de reafirmar su apoyo al “derecho a decidir”, sin olvidar el eje social. Para hacerlo efectivo los comunes reiterarán su propuesta de referéndum pactado con el Estado, para lo cual proponen previamente un pacto de claridad que marque las normas con las que se debería celebrar una eventual consulta, tanto sobre el “nuevo modelo territorial español” como sobre la “propuesta de encaje de Catalunya en este marco”.
El Govern, por su parte, que además de por Torra estará representado por el vicepresidente y conseller de Economia, Pere Aragonès, la portavoz y consellera de Presidència, Elsa Artadi, y la consellera de Justícia, Ester Capella, acude a la cita con la “voluntad de facilitar el diálogo” para hacer posible que se alcancen “acuerdos sobre los grandes temas de país”. De acuerdo con ello, la previsión es poner encima de la mesa sus dos grandes caballos de batalla desde el inicio de la legislatura –la situación de los “presos políticos y exiliados” y la necesidad de encontrar una salida política al conflicto político de Catalunya– y, a partir de aquí, intentar trasladar justamente al terreno político los tres grandes consensos sociales que defiende que existen a favor de la república frente a la monarquía y del derecho de autodeterminación y en contra de la represión.
Una tarea que es perfectamente consciente que no será en absoluto fácil, porque precisamente el PSC ahora rechaza la autodeterminación. Por esta razón la pretensión del Govern en este primer encuentro no será tanto cerrar acuerdos concretos como facilitar que las vías de diálogo avancen con vistas a nuevas reuniones. Y también ante la inminente negociación de los presupuestos de la Generalitat del 2019, para los que JxCat y ERC necesitan socios alternativos a la CUP.
La gran ausente será Inés Arrimadas como líder de la oposición. La dirigente de Cs defendió, en una carta a Torra, que “todo debate relativo al futuro de Catalunya entre las fuerzas políticas debe realizarse en el Parlament con respeto a las normas democráticas vigentes”.
LÍNEA DE TRABAJO
El Govern quiere reafirmar la apuesta por la república, los presos y la autodeterminación
PROPUESTA ALTERNATIVA Arrimadas defiende que todo debate se haga en el Parlament y con las normas vigentes