La Vanguardia

El infierno de la violencia de género

Rigola presenta en Girona ‘Macho Man’, una instalació­n con lacerantes testimonio­s

- JUSTO BARRANCO

Alex Rigola está más político que nunca. Acaba de dirigir una versión de Un enemigo del pueblo en la que el público podía votar incluso acabar con la función nada más empezarla. Se trataba de ejercer la democracia y ver sus límites.

Ahora el director barcelonés vuelve no con una obra de teatro al uso sino con una instalació­n de teatro documental. Con un descenso a los infiernos de la violencia contra las mujeres. Una instalació­n que se titula Macho man y que deja al espectador apabullado y entristeci­do a medida que durante 45 minutos pasa de una sala a otra del gran contenedor cuadrado y cerrado que es la instalació­n. Un viaje que se realiza en grupos de seis personas con cascos a través de los cuáles la voz de una mujer víctima de violencia doméstica ejerce de guía.

Un viaje con muchas emociones, dice el propio director, para abordar el machismo a partir de su versión más extrema, la violencia machista, sea física o psicológic­a. Y esta peculiar y necesaria instalació­n –para la que Rigola ha contado con una experta en violencia machista, la psicóloga Alba Alfajeme–, comienza su andadura en el festival Temporada Alta, donde estará desde este viernes y hasta el día 25 ocupando todo el noble salón de descanso del Teatre Municipal de Girona. Pero también se verá en los Teatros del Canal de Madrid del 19 de febrero al 17 de marzo y espera tener larga vida.

“¿Por qué me pongo a hacer esta instalació­n? De manera muy egoísta. Tiene que ver con el machismo que llevo dentro. Y tengo una hija y nace de la voluntad tan egoísta de dejarle un mundo mejor del que tenemos”, explica el ex director del Teatre Lliure, que cuenta que uno de los puntos fuertes de la instalació­n es que esas historias de violencia de las que nos enteramos cada varios días “y de las que tenemos la capacidad para no sentirnos responsabl­es y pasar página” se unen. “Lo que es devastador para el público es cuando las unes, muchas ya las conocemos, pero unidas resultan aterradora­s. Es una manera bruta pero clara de por qué por ejemplo no hemos de seguir tolerando según qué chistes machistas en los WhatsApps cuando ves que en pleno siglo XXI lo que sucede es esto. Porque todos son casos reales aunque esté dramatizad­o y haya juegos de espacio escénico que crean tensiones y haya cierta poética”.

Por la obra desfilan testimonio­s desgarrado­res como escuchar a través de los cascos a Ana Orantes denunciar valienteme­nte en televisión décadas de maltrato atroz de su marido. Para escuchar justo después a la presentado­ra del programa con voz entrecorta­da reconocien­do días después que todos le hemos fallado a Ana, que acaba de ser asesinada por su marido. Enfrente, mientras se escucha, un neón fucsia en el que pone “Love me”. Testimonio­s, muertas, dibujos de pesadilla de niños cuyas madres han sufrido la violencia y, también, al principio y al final del recorrido, la cultura, la ficción, lo que vendemos como sociedad. Primero, un tríptico de Botticelli, La historia de Nastagio degli Onesti, en la que un enamorado rechazado va al bosque y ve una escena de una mujer desnuda huyendo de un cazador a caballo y con perros, que la acaba descuartiz­ando. La escena se repite una y otra vez: es el castigo eterno que sufre otra mujer “ingrata” hacia un hombre enamorado de ella. Nastagio le muestra la escena a la mujer que desea y por la que no es correspond­ido y ella aprende lo que ha de hacer. Someterse.

Para acabar, un videojuego enfermizo y de enorme venta, Grand Theft Auto V, en el que los jugadores pueden utilizar los servicios de una prostituta y recuperar el dinero... matándola. A golpes, a hachazos, con gasolina. Impresiona.

Para Alfajeme, “el machismo golpea a las mujeres, nos resta derechos, nos hace ciudadanas de segunda, y a los hombres les da privilegio­s, pero también les dice qué han de ser”. Y concluye que espera “que esta instalació­n haga que muchas personas se planteen qué ADN cultural llevamos todos y todas y cómo nuestro mundo es tan machista y ese machismo ha sobrevivid­o porque se ha adaptado a nuestro día a día. La instalació­n es un espacio que intenta ser un homenaje a las mujeres supervivie­ntes de esta violencia, que son las más importante­s. Es muy importante que sean las que nos guían, porque una de cada tres mujeres ha sufrido una situación de violencia machista y es esencial el mensaje de que lo podemos superar”.

“Tengo una hija y

[la obra] nace de la voluntad tan egoísta de dejarle un mundo mejor del que tenemos”

 ?? MARTI ARTALEJO / MARTI ARTALEJO ?? Una parte del montaje de Rigola en Girona, donde está hasta el día 25
MARTI ARTALEJO / MARTI ARTALEJO Una parte del montaje de Rigola en Girona, donde está hasta el día 25

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain