España aprovechará los 40 años de la Constitución para mejorar su imagen en EE.UU.
Catalunya y el rebrote de la ‘leyenda negra’, retos comunicativos
La campaña conmemorativa del 40.º aniversario de la Constitución –“40 años de democracia, 40 años de libertad”– se extenderá también al extranjero como parte de la estrategia del Gobierno de Pedro Sánchez para mejorar la imagen de España en el exterior y contrarrestar el relato del movimiento independentista catalán. Las principales embajadas españolas celebrarán diferentes actos para resaltar el valor de la Carta Magna en la restauración de la democracia y como instrumento de convivencia, informaron fuentes diplomáticas.
La embajada española en Washington prepara un acto en un think tank o laboratorio de ideas de la ciudad y otro en una universidad que tendrán lugar en diciembre con presencia de algún experto en Derecho Constitucional. El objetivo es llegar a los diferentes públicos de la capital, tanto los círculos políticos como los académicos, en los que el Ministerio de Exteriores se ha encontrado con que han prendido lo que considera versiones alternativas de la realidad política española.
La campaña “40 años de democracia, 40 años de libertad” fue presentada en septiembre en el Congreso de los Diputados por su presidenta, Ana Pastor, y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, entre otros. No es casual que se vaya a extender, entre otros países, a Estados Unidos. Washington ha sido, junto con Bruselas, un escenario clave de la batalla por el relato entre el movimiento independentista catalán en sentido amplio y el Gobierno español. La capital federal fue el escenario del choque público más fuerte entre el Govern y las autoridades españolas, cuando en junio el president Quim Torra aprovechó la inauguración de un festival para reclamar la libertad de los políticos presos, intervención que tuvo una contundente réplica del entonces embajador, Pedro Morenés.
Washington ha sido también la primera delegación fuera de Europa que el Govern ha reabierto un año después de la aplicación del artículo 155. El conseller de Acció Exterior, Ernest Maragall, inauguró el jueves la oficina, que ahora dirige la politóloga Victòria Alsina. Elegida por concurso público, Alsina rehuyó de los temas políticos y prometió trabajar para “conectar el talento americano y el catalán a nivel universitario, empresarial, turístico y científico”. Maragall manifestó, no obstante, su deseo de que la oficina sirva para “que Catalunya cuente con un reconocimiento de su condición de país” y recabe “presión democrática respecto a nuestra situación y la libertad de los presos políticos”.
En Estados Unidos, los retos comunicativos van más allá del conflicto político catalán. “Explicar la realidad de la España de hoy, recordar y potenciar nuestro legado y lo que significó la presencia española en América” dentro de su contexto histórico son los objetivos del nuevo embajador de España en Washington, Santiago Cabanas. “Hemos visto cierto rebrote de la ‘leyenda negra’ en algunos puntos del país”, comentó el viernes en un encuentro con la prensa. En pleno debate sobre el racismo de las estatuas de la Confederación, esta misma semana la ciudad de Los Ángeles ha retirado una estatua de Cristóbal Colón. En septiembre, la Universidad de Stanford eliminó de su campus el nombre del fraile mallorquín Junípero Serra.