El crédito al consumo repunta tras años de austeridad
Crece la financiación bancaria para reponer coches y electrodomésticos
El Banco de España ha alertado en las últimas semanas del incremento registrado por el crédito al consumo y los efectos de su morosidad en los balances de la banca. Y es cierto. El crédito al consumo ha pasado de los 44.000 millones de euros de junio del 2015 a los 62.800 millones de euros del pasado mes de junio. Un espectacular 40% de subida. Pero las cifras son engañosas. El dato del crédito no obedece a un desenfrenado regreso del consumismo, sino a un mínimo de alegría después de años de austeridad. En efecto, en muchas ocasiones, el crédito se concede para reponer un electrodoméstico viejo o en mal estado o un vehículo matriculado hace una década o más.
De hecho, dentro del crédito al consumo la partida más importante corresponde a la adquisición de bienes duraderos. Fundamentalmente a dos tipos. Coches y electrodomésticos. En esta partida se ha pasado de los 20.500 millones de euros a los 35.000 millones en el periodo antes mencionado. Esto es, un inusitado incremento del 70%. “La gente pide crédito para renovar los electrodomésticos, adquirir un coche o hacer reformas en el hogar” señalan fuentes bancarias.
En el ámbito de los electrodomésticos la venta obligada por obsolescencia de los aparatos está muy clara. “El mercado que está tirando de las ventas es el de reposición porque se han estropeado, por antiguos porque se buscan electrodomésticos con mayor eficiencia energética...”, dice Alberto Zapatero, director general de la Asociación Nacional de Fabricantes e Importadores de Electrodomésticos (Anfel). “El de primera equipación –apunta–, todavía está muy parado, puesto que el año pasado sólo se entregaron unas 55.000 viviendas nuevas, cuyas cocinas hay que equipar de forma completa”. El directivo hace las cuentas: “Si en esas viviendas de obra nueva se instalan unos cinco electrodomésticos, para este mercado sólo se venden al año unos 275.000 aparatos”. Entidades como las agrupadas en Anfel son responsables del 30% del crédito al consumo. El 70% restante va a cargo de la banca.
El año pasado, las ventas de electrodomésticos de gama blanca (frigoríficos, lavadoras, lavavajillas, hornos y campanas) se elevaron a 6,78 millones de unidades y supusieron una cifra de negocio de 1.605 millones. No obstante, aclara Zapatero, “no tenemos las cifras exactas de cuántos se financian y cuántos se pagan al contado”. La prueba de que los hogares no están todavía para muchas alegrías se reflejan en el gráfico que se adjunta, en el que la cifra de negocio del 2017 destinada a la compra de electrodomésticos fue de 1.605 millones de euros. Muy lejos de los 2.512 millones de euros que se dirigieron a este segmento del crédito en el 2006.
En el mercado de vehículos, ocho de cada diez se pagan con préstamos al consumo, según los datos que manejan Faconauto, la patronal de los concesionarios y Anfac, la de los fabricantes. No obstante, cada vez hay más alternativas, como la fórmula de renting para particulares, que va ganando adeptos. El sector automovilístico espera acabar este año con 1,2 millones de unidades vendidas, lo que sería un 7% más que en el 2017.
Pero el Banco de España no entiende motivaciones. Y ha advertido a la banca que tenga cuidado con este tipo de préstamos porque “aunque sólo representan un 5% del crédito total que se concede en España, sí que se percibe que la morosidad está creciendo”. En concreto, la tasa de crecimiento de los dudosos en créditos para bienes duraderos se está acelerando de forma notable: ha pasado del 7% en diciembre del 2017, al 19% en marzo del 2018 y hasta el 22,6% en junio del 2018.
Menos problemática es la financiación de los llamados servicios corrientes, que crece y lo hace en menor medida. Entre junio del 2015 y junio del 2018 ha pasado de 23.900 millones a 27.900 millones de euros. Esto es un 16,5% más. ¿Qué se esconde tras esa partida? Básicamente tres conceptos. La financiación de las vacaciones. La compra de teléfonos móviles y de ordenadores. En este caso, sí, que a diferencia del crédito de bienes duraderos, se percibe algo más de alegría.
AVISO
El Banco de España alerta del aumento de la morosidad en este tipo de préstamos
ALEGRÍA CONTENIDA
Las ventas de aparatos para el hogar aún están lejanas a las de antes de la crisis