Un bebé que venía de nalgas muere en un parto casero sin asistencia en Vigo
Un bebé que venía de nalgas murió el lunes en Vigo durante el parto, realizado en casa y sin asistencia profesional. Los padres pidieron ayuda al 061 cuando no pudo completarse el parto, pero cuando llegaron al hospital los médicos no consiguieron reanimarle.
Según La Voz de Galicia, los padres optaron por el parto en casa porque habían tenido su primer hijo de este modo y creían que era la mejor opción. Según se recoge en el parte oficial al juzgado, la madre había desistido de los controles habituales de seguimiento del embarazo. Aunque al principio de la gestación fue atendida por los servicios sanitarios , a partir del último mes había dejado de acudir al obstetra. Algunas fuentes aseguran que contaba con el asesoramiento de una persona que no era profesional sanitaria. El caso está siendo investigado judicialmente y a la espera del resultado de la autopsia.
En Galicia, como en la mayoría de las comunidades, hay matronas que atienden partos en el domicilio, pero exigen que se cumplan determinadas condiciones. Y una de ellas es que el bebé no venga de nalgas. En esos casos, los servicios de obstetricia de los hospitales suelen intentar darle la vuelta manipulando exteriormente el feto, pero si no se consigue, el nacimiento requiere una cesárea. El parto en posición podálica se considera siempre de riesgo y se remite al hospital en todos los casos, de forma que no sólo lo atiende una matrona, sino también un ginecólogo.
Según fuentes sanitarias que cita La Voz de Galicia, la pareja había intentado contactar con varias comadronas para preparar el parto y estas les habían advertido que, como el niño estaba de nalgas, no se debía hacer fuera del hospital. Pero los padres querían repetir la experiencia satisfactoria del primer parto.
Cuando todo empezó a ir mal, la pareja llamó al 061. Acudieron dos ambulancias, una medicalizada y otra asistencial, que llevaron a la mujer y al niño hasta el hospital Cunqueiro. El bebé falleció antes de entrar en el centro hospitalario, según confirmó el servicio gallego de salud (Sergas).
El personal de emergencias trató de ayudar en la propia casa, antes de encaminarse al hospital. Los trabajadores del 061 no se encontraron a ningún profesional sanitario en el domicilio.
Finalmente llevaron a la madre y al niño al hospital, donde los médicos de la unidad de neonatología ya no tuvieron opciones para salvar la vida al bebé, aunque trataron de reanimarlo.