Catalunya se queda con pellizcos del gordo y de los otros premios
Almansa se lleva una lluvia de 174 millones de euros en un sorteo muy repartido
En Catalunya cayó ayer el gordo, una serie entera del segundo premio, además de otros tantos décimos, como también pasó con el tercero. Y por si fuera poco, el territorio también fue agraciado por uno de los dos cuartos y varios quintos. Hubo casi pleno, pero no hubo lluvia de millones... Más bien una pequeña llovizna. Y es que los premios que cayeron en Catalunya, sin contar pedreas y reintegros, suponen alrededor de unos 27 millones de euros, el 7,2% de lo invertido. Pellizcos de un sorteo extraordinario de la lotería de Navidad que, en su conjunto, fue también muy repartido.
La venta por internet, por máquina, o el hecho de que una administración, por pequeña que sea, pueda vender un gran abanico de números están acabando con la concentración de los prenistraciones mios. Algo que no evita que siga habiendo ilusión, brindis con cava, alegría, sorpresas, manifestaciones expresas de hacer un viaje soñado o el compromiso de tapar agujeros tras haber ganado un premio. Simplemente, pasó ayer, ahora se oye en más sitios.
En este sentido, el gordo, el 3.347, remolón porque no hizo aparición hasta más tarde de las doce y media, se repartió por casi la totalidad de la geografía española hasta el punto que tan sólo Ceuta y Melilla, y las provincias de Álava, Palencia, Guadalajara y Castellón, se quedaron sin el primer premio. Eso sí, en algunas ciudades cayó con más fuerza que en otras.
“Estamos muy gratamente sorprendidos y muy felices de compartir este premio con un montón de familias del colegio, además de profesores y antiguos alumnos“, explicaba eufórico el director del colegio San Viator de Huesca, Salvador Arto. No era para menos: la Asociación de Antiguos Alumnos vendió un total de 1.200 participaciones de cinco euros del 3.347. En total han repartido 120 millones entre conocidos y conocidos de conocidos, informa Mario Sasot.
La misma cantidad millonaria que repartió también una administración de Gernika –la mayor parte de los números se distribuían a través de la taberna Alboka–, y pudo haberlo hecho también otra administración ubicada en un centro comercial de Cuenca, si no hubiera devuelto ocho de las 30 series que tenía consignadas. Aun así, este lotero distribuyó unos 88 millones de euros, casi todos en ventanilla, como también lo ha hecho otra administración de Bilbao: en este caso. unos 68 millones de euros décimo a décimo.
Y aparte, también cayó el gordo en Torrejón de Ardoz, La Manga, Santiago de Compostela... Y llegó a Catalunya, aunque por máquina. Por este método se habrían vendido gran parte de los 35 décimos sueltos de este primer premio, que suman más de 14 millones de euros. Un total de 14 décimos, ahora premiados, se repartieron a través de seis admi- de Barcelona: cuatro en una de Sabadell, dos en otra de Santpedor, dos en una de La Seu d’Urgell y varios sueltos en locales de Figueres, Pineda de Mar, Sant Feliu de Codines... También se vendieron décimos en Altafulla y Camarles, lo que hace que, por primera vez, al menos que se recuerde, el gordo haya caído en la provincia de Tarragona. Aunque sea de manera anecdótica, ya que se trata tan sólo de dos décimos vendidos a través de una máquina.
La lluvia de millones, aunque menor que en otras ocasiones, ayer no vino con el primer premio, sino con el segundo, el 21.105. Mucho más mañanero (apareció a las 9.30 horas) y que cayó con fuerza en Almansa: unos 174 millones de euros vendidos por la administración número dos de la población albaceteña y
VENTA POR MÁQUINA Barcelona reparte 5,6 millones del primer premio en diez administraciones
EN HUESCA
El colegio San Viator distribuye 120 millones por medio de 1.200 papeletas
muy repartidos en el municipio, en parte, porque más de 40 millones se vendieron en participaciones de la asociación de peluqueras y estilistas. La lotera calculó que unos 150 millones de euros, de una manera u otra, se habían quedado en este pueblo de 24.000 habitantes.
Este número también se vendió en la ventanilla de una administración de Castellbisbal: otro pellizco, en este caso, de 1,250 millones de euros.
El tercer premio, el 4.211, fue el último en salir y estuvo muy repartido, destacando los 22,5 millones de euros que dejó en Miranda de Ebro. Aparte de en la población burgalesa, también recayó en Tudela, Viver, Catarroja... Así como en una veintena de poblaciones catalanas con 1,8 millones de euros a repartir a través de 36 décimos de los que vendieron 14 en diferentes administraciones de Barcelona, y diez en la administración de Gavà de la rambla Vayreda: el primer premio del sorteo extraordinario de Navidad de este local abierto hace 21 años, según explicaba el lotero.
También muy repartido estuvo uno de los cuartos premios, el 67.774, si bien no se vendió nada en Ripollet, a pesar de que una administración de este municipio tenía consignada 15 series –unos tres millones de euros en premios–, porque las devolvió; sí se vendieron décimos en l’Hospitalet de Llobregat, Les Franqueses del Vallès, Castelló d’Empúries, Sarrià de Ter, Balaguer, Lleida o Cambrils.
Un rácano balance de la lotería para Catalunya, que, en este contexto, fue uno de los territorios más beneficiados por los premios de menor cuantía, los quintos, que dan derecho a 6.000 euros por décimo y que igualmente fueron muy repartidos, si bien en Catalunya recalaron cinco de los ocho quintos premios que entran en el bombo.
Tarragona fue, en este caso, la más agraciada. La administración número 19, La Fortuna, de la capital de la provincia, vendió 160 décimos del 29.031 –960.000 euros en premios–, de los que 158 se los quedaron en la librería Esther de Segur de Calafell para ofrecerlos a sus clientes. También repartió 648.000 euros de este mismo premio la asociación Gent Gran de Ascó, aunque los décimos, vendidos a través de participaciones, la entidad los compró en la administración valenciana de Mislata.
Pineda de Mar, Sant Boi o Barcelona fueron algunas de las otras poblaciones agraciadas por un quinto premio.