Marcos Llorente, héroe por accidente en el Real Madrid
Marcos Llorente pertenece a una familia que ha dado seis futbolistas y dos baloncestistas al club blanco
Pocas veces en la historia reciente del Real Madrid un jugador se ha revalorizado tanto y en tan poco tiempo como Marcos Llorente, un futbolista que parecía condenado a salir en este mercado de invierno tras más de una temporada en completo ostracismo y al que un cúmulo de circunstancias favorables han elevado hasta hacerle una pieza capital en el Madrid de Santiago Solari, un ascenso meteórico culminado el sábado al ser designado el MVP del Mundial de clubs, galardón que sólo habían logrado antes otros dos españoles: Raúl (2008) y Sergio Ramos (2016).
De la lectura estos días de los foros madridistas pareciera que Marcos Llorente acaba de aterrizar en el club de Concha Espina. Es todo lo contrario. Nadie en la plantilla puede presumir ni de lejos de genealogía más madridista. En su caso sí que parece justificado el dicho del que tanto presume Florentino Pérez con cualquier fichaje: “Nacido para jugar en el Madrid”. En el árbol genealógico de Marcos Llorente hay cinco jugadores que han vestido antes que él la camiseta del primer equipo blanco: Paco Gento, el presidente de honor, su tío abuelo; Ramón Grosso, de la quinta de los yeyés, su abuelo; Paco Llorente, de la quinta del Buitre, su padre; Julio Llorente, su tío, y Antonio Gento, Gento III, también tío abuelo, quien llegó a jugar tres partidos de la temporada 1961-62. Pero además, otro tío abuelo, Julio, también hermano de Paco Gento, jugó en las divisiones inferiores y otros dos tíos, José Luis y Toñín Llorente, integraron muchos años el primer equipo de baloncesto.
Con todo ese bagaje no era de extrañar que Marcos Llorente ingresara en las divisiones inferiores del Madrid en el año 2008, con 13 años. En el 2014 llegó al Castilla con fama de ser un mediocentro de mucha calidad, un jugador en el que se vaticinaba un nuevo Xabi Alonso: gran visión de campo, buen desplazamiento de balón y un gran despliegue físico. Su segunda temporada en el Castilla fue tan buena que Zinédine Zidane le hizo debutar en el primer equipo. Sin embargo, la progresión de Casemiro, recuperado del Oporto el año anterior, hizo ver al club que lo mejor para Marcos Llorente para el curso 2016-17 era una cesión donde tuviera minutos. Dicho espacio vital lo encontró en el Alavés de Mauricio Pellegrino, donde fue titular y disputó 32 de los 36 partidos de Liga.
El Madrid ya no quiso esperar más. Zidane le reclutó para la campaña 2017-18 y el 24 de septiembre Florentino Pérez le amplió el contrato hasta junio del 2021 con una cláusula de 300 millones. A partir de ahí todo se torció. Llorente no entró nunca en los planes de Zidane porque Casemiro lo jugó todo. El joven madrileño fue un jugador residual. Jugó únicamente cinco partidos de Liga como titular y entre los 13 jugados sólo alcanzó los 560 minutos.
Así las cosas, Llorente pidió una cesión en verano. Málaga, Valencia y Alavés le querían. El jugador estaba de acuerdo pero Julen Lopetegui se negó. Pero tampoco el técnico de Asteasu contó con él. El Alavés insistió en pedirle para este invierno. Y en esas, Solari sustituyó a Lopetegui tras la derrota blanca en el Camp Nou. El argentino, de inicio, tampoco contó con Llorente pero el 12 de noviembre Casemiro se lesionó. En el siguiente partido, el día 24 en Ipurua, Solari colocó a Ceballos de medio centro y aquello acabó en naufragio ante el Eibar (3-0). Tres días después, el 27, el Madrid se la jugaba en la Champions ante el Roma en el Olímpico. Solari sopesó dos opciones para cubrir el puesto de mediocentro defensivo: Llorente o Fede Valverde, la joven promesa uruguaya. Se decantó por Llorente. El Madrid ganó y el sobrino nieto de Gento fue de los más destacados. Aprovechó la oportunidad. Derribó la puerta, la única manera que tiene de jugar en el Madrid un canterano, en definición de Camacho. Y así hasta el MVP de Abu Dabi, final en la que marcó su primer gol, un remate lejano a botepronto. Ya lleva 678 minutos jugados, más que en toda la Liga anterior.
Casemiro se ha encontrado un serio competidor. A Solari le queda por resolver una papeleta que se antoja nada sencilla.
EL PERCANCE DE UN COMPAÑERO Llorente quería marcharse este invierno cedido al Alavés pero la lesión de Casemiro le hizo titular
LOS FAMILIARES
Han jugado en el Madrid Paco Gento, Antonio Gento, Ramón Grosso, Paco Llorente y Julio Llorente