Catalunya cierra el año laboral más agitado desde el final de la crisis
El año que acaba será recordado en Catalunya como uno de los más agitados a nivel laboral, si no el que más desde el fin de la crisis, al confluir las reclamaciones salariales de los convenios con protestas para revertir los recortes en servicios públicos como la sanidad o la educación. Las estadísticas oficiales de la Generalitat sobre conflictividad laboral sólo llegan hasta el mes de julio, pero ya sirven para poner en evidencia que el 2018 ha sido un año mucho más movido que el anterior y los que le preceden, informa Efe.
Así, las jornadas perdidas por huelgas en Catalunya de enero a julio del 2018 se elevaron a 117.620, frente a las 48.012 del mismo periodo del 2017; y las horas perdidas llegaron a 940.946, frente a las 366.464 de un año antes. Además, el índice de incidencia en estas huelgas (trabajadores participantes en relación a la plantilla convocada) fue de 63,7 frente a 9,2 hasta julio del 2017, según los datos del Observatorio de Trabajo y Modelo Productivo de la Generalitat.
De hecho, las cifras sobre horas y jornadas perdidas y el índice de incidencia hasta julio del 2018 ya superan los números de todo el 2017 y se acercan mucho a los del 2016. De estas estadísticas quedan excluidas las huelgas generales, como fue la huelga feminista del pasado 8 de marzo. A falta de los datos oficiales de septiembre a diciembre, se puede concluir que el 2018 será el año más convulso laboralmente desde el fin de la crisis, en el 2014.