Peores perspectivas
El Gobierno cree que la economía crecerá al 2,2%, una décima menos
La ministra de Economía y Empresa, Nadia Calviño, anuncia que el Gobierno español ha rebajado la previsión de crecimiento del PIB para este 2019 una décima –hasta el 2,2%–, al tiempo que empeora la estimación de la tasa de paro, que pasa del 13,8% al 14%.
La desaceleración económica será algo más acusada de lo proyectado hasta el momento por el Gobierno. El Ejecutivo de Pedro Sánchez rebaja la previsión de crecimiento del PIB para este 2019 en una décima y la sitúa en un 2,2%, al tiempo que empeora la estimación de la tasa de paro, que pasa del 13,8% al 14%, según adelantó ayer la ministra de Economía y Empresa, Nadia Calviño. Con esta revisión a la baja de la evolución del PIB, iguala su proyección a las realizadas el otoño pasado por el Banco de España, la Comisión Europea y el FMI, ante el empeoramiento de la economía global.
Sin embargo, la ministra Calviño justificó ayer el empeoramiento de las previsiones sobre el PIB por “el mayor ajuste fiscal”, que se ven obligados a realizar ante el veto del Senado a la propuesta del Ejecutivo socialista para que el objetivo de déficit de este año fuera del 1,8% del PIB, en lugar del 1,3% aprobado por el equipo de Cristóbal Montoro. Hoy el Consejo de Ministros presenta el proyecto de ley de los presupuestos generales del estado, así como una actualización del cuadro macroeconómico que le acompaña. La propuesta de las nuevas cuentas para el 2019 llegarán al Congreso el lunes.
“Una política fiscal más dura, un ajuste más fuerte, supone menor crecimiento”, defendió ayer la ministra de Economía en una entrevista en RNE, Calviño explicó que los datos económicos del último trimestre del 2018 habían sido “más positivos”, por lo que esperaban cerrar el año con un incremento de la actividad del 2,6%. Y este crecimiento “muy notable”, afirmó, vinculado a los buenos resultados del mercado laboral, la caída del precio del petróleo y el impacto positivo en las rentas de las familias de decisiones como la subida del salario mínimo a 900 euros, la actualización de las pensiones y el salario de los empleados públicos, les habría lleva a mejorar incluso las previsiones para el 2019 “si hubiéramos mantenido la senda de junio”.
Desde la Moncloa, afirman que, de haber podido aprobar el objetivo de déficit del 1,8%, la evolución del ciclo económico les habría llevado incluso a mejorar en una décima el incremento del PIB –hasta el 2,4%–. Por ello, estiman que el impacto en la economía por tener que seguir con la senda fijada por el Ejecutivo del PP ha restado dos décimas de PIB.
Por lo que respecta al empleo, la máxima responsable del departamento de Economía avanzó que la estimación del Gobierno es que entre el 2018 y el 2019 se creen 800.000 puestos de trabajo. La tasa de paro será del 15,5% en 2018 –igual a la previsión anterior, publicada el pasado octubre– y del 14% en el 2019 –dos décimas más que en el anterior cuadro macroeconómico–.
Este enfriamiento de las previsiones amenaza con convertirse también en un dolor de cabeza para los empleados públicos, que tienen condicionados la parte variable de su subida salarial de hasta un 0,25% a la evolución del PIB. El sindicato CSIF indicó ayer que el Ministerio de Política Territorial y Función Pública se ha mostrado “dispuesto a valorar” cómo va a afectarles a la hora de calcular la mejora pactada en el sueldo para el 2020.