Al Girona se le escapa el triunfo
No bastó con un gran gol de Stuani para doblegar al peligroso Alavés
El Girona ya acumula 6 partidos sin ganar a la Liga después de empatar ayer contra el Alavés. En esta mala racha, los de Eusebio sólo suman 4 puntos de 18, con un balance de cuatro empates y dos derrotas. Para encontrar la última victoria gerundense en la competición hay que retroceder hasta el mes de noviembre en Cornellà contra el Espanyol, aunque en la Copa los catalanes fueron capaces de eliminar precisamente al Alavés después de ganarles 2-1 en Montilivi.
Ayer Eusebio recuperaba para el once titular a Pere Pons, que venía perderse los dos últimos partidos por lesión, además de a varios jugadores que descansaron en la Copa como Stuani, Juanpe, Porro y Bounou, que contra los vitorianos estrenó su condición de renovado hasta el 2021, tal como el club hizo oficial el viernes.
Una de las dudas volvía a ser quien ocuparía el carril izquierdo, teniendo en cuenta los lesionados y las buenas prestaciones del joven del filial Valery, pero a diferencia de lo que pasó contra el Atlético de Madrid, Eusebio prefirió apostar por el capitán Àlex Granell, nuevamente desplazado de su posición natural del medio del campo.
De todos modos al equipo no le faltó profundidad de inicio en esta banda, ya que sólo empezar, en el minuto 1, un centro desde la izquierda habría podido suponer el primer gol del partido si Stuani no hubiera rematado tan centrado.
Pero el uruguayo, que normalmente no perdona y que ya acumulaba cuatro partidos sin marcar, se sacó de la manga un remate acrobático de chilena minutos más tarde para hacer un golazo que Pacheco sólo vio pasar. Montilivi se rendía un día más a su pichichi, autor de 12 goles en la primera parte del campeonato.
Mientras tanto, el Alavés, acusando mucho las bajas del lesionado Jony y sobre todo de Ibai –fichado esta semana por el Athletic–, seguía sin entrar en el partido ante la desesperación de Abelardo, que con el de ayer se convertía en entrenador centenario en Primera División, en su 50.º partido dirigiendo el banquillo del equipo vasco.
Durante el primer tiempo, los visitantes sólo fueron capaces de llegar con peligro en una ocasión por una imprecisión en un servicio de banda entre Granell y Juanpe que salvó una mano milagrosa de Bounou en primera instancia y la cabeza de Alcalá posteriormente, evitando que entrara el rechace.
Antes del descanso, el incansable Pedro Porro estuvo a punto de anotar el segundo gracias a un chut envenenado con muy poco ángulo desde la banda derecha que entre Pacheco y el palo rechazaron.
En la reanudación la intención de los gerundenses era dar continuidad a las buenas sensaciones que había transmitido el equipo en la primera mitad pero, a pesar de tener el partido controlado, en una pelota dividida dentro del área, Borja Bastón ganó la espalda a los centrales locales Bernardo y Juanpe y puso el pie para enviarla a la escuadra.
Por si fuera poco, el Girona vio
El equipo de Eusebio cierra la primera vuelta con 24 puntos, dos menos que hace un año con Machín
DOCE GOLES
El delantero uruguayo ya tiene la docena, pero una tarjeta amarilla lo apartará del próximo partido
cómo, seguidamente, el árbitro Sánchez Martínez amonestaba a Stuani por simular una caída dentro del área que le supondrá perderse el próximo partido por acumulación de amarillas.
Buscando la reacción, Eusebio decidió empezar a mover piezas y dio entrada a Valery por Douglas Luiz y devolvió a Granell al medio del campo, aunque fue sustituido por Aleix Garcia al cabo de unos minutos después de que en un despiste defensivo Calleri tuviera el gol a punto con un remate de cabeza dentro del área que Bounou pudo bloquear.
En el tramo final y empujados por los 10.300 aficionados que llenaban Montilivi, los gerundenses hicieron más méritos para deshacer el empate pero no dispusieron de opciones muy claras más allá de algún centro buscando la cabeza de Stuani o el penalti que reclamó Portu, que el árbitro consideró inexistente.
Con este nuevo empate el Girona cierra la primera vuelta con 24 puntos, dos menos que los que consiguió el equipo en las 19 primeras jornadas de la temporada pasada con Pablo Machín en el banquillo. El Alavés, en cambio, continúa con la etiqueta de equipo revelación colgada y ha dormido en posición de Liga de Campeones.