Morir por trabajar
Los datos de siniestralidad laboral alertan de un preocupante aumento del 4,5% en los accidentes mortales, que en el 2018 ascendieron a 506.
La siniestralidad laboral mortal volvió a repuntar el año pasado en el conjunto de España y superó la cifra de medio millar de personas por primera vez desde el 2015. Las estadísticas del Ministerio de Trabajo muestran que fallecieron 506 empleados en accidentes laborales, un 4,5% más que el año anterior. Son 22 fallecidos más. En el caso de los accidentes in itinere (los que se producen al ir o volver del trabajo), en el 2018 también se incrementaron: un 9%, hasta los 146.
Si se descartan los fines de semana, la cifras muestran que el año pasado hubo dos muertes al día por accidentes de trabajo. Ana García, de UGT, destacó ayer que “necesitamos un plan de choque contra la siniestralidad”. García añadió que “la siniestralidad tiene que ver en muchas ocasiones con el tipo de contrato, porque en el caso de los eventuales los trabajadores reciben menos información”. Las cifras de accidentes laborales se conocieron ayer, el mismo día en el que falleció un trabajador de Seat en la planta de Martorell a causa de una caída en altura.
Francesc Montoro, de CC.OO., señaló que lo más importante en la prevención sobre accidentes es atacar el problema desde los siniestros leves. En el conjunto del año, se contabilizaron 602.316 accidentes laborales con baja, lo que supone un aumento del 3,2% respecto al número de siniestros del mismo periodo del 2017.
En Catalunya se han reducido los accidentes laborales mortales de 56 a 54. El porcentaje de accidentes mortales en Catalunya respecto al total del Estado (10,6%) es inferior al peso de la comunidad en el conjunto de la economía y en la población.
Los accidentes leves con baja en el puesto de trabajo sumaron 515.614 en el 2018, un 3,2% más, y los graves alcanzaron los 3.917, también un 3,2% más. En el caso de los siniestros in itinere, se registraron 82.279 accidentes de carácter leve (+3,3%) y 1.022 de gravedad (-1,8%).
Entre las causas de fallecimiento destacan los infartos, derrames cerebrales y otras causas estrictamente naturales (215), y los accidentes de tráfico (113).
Ana García aseguró que la evolución de la siniestralidad laboral no se explica por el crecimiento económico, sino que depende de otras variables, como por ejemplo el tipo de contrato o el sector de actividad.