Productos vestidos de etiqueta
EL CUIDADO ETIQUETADO EXPLICA LA HISTORIA Y EL ORIGEN DE LOS MEJORES PRODUCTOS DEL MUNDO EN PYRÉNÉES
Si lo que dice el refrán es cierto y somos lo que comemos, la calidad debe ser cuanto más alta mejor. Ese es el objetivo de los Grandes Almacenes Pyrénées. Día a día, sus expertos trabajan para conseguir los mejores productos y los etiquetan debidamente para que este arte no pase desapercibido. De este modo, sus clientes pueden reconocer la exclusividad de su compra de un simple vistazo. La lista de productos premium es larga: su cava de quesos es un espacio único, ya que es el primer supermercado de Europa en contar con una sala dedicada exclusivamente a este producto, con las condiciones de humedad, temperatura e iluminación controladas, para que el queso llegue a casa con las condiciones óptimas.
El jamón sigue los mismos pasos de calidad. En función de su etiquetado (negro, rojo, verde y blanco), varía la raza, el origen y la alimentación del animal. Por ejemplo, la cinta negra se reserva para jamones que proceden de cerdos cien por cien ibéricos, criados en libertad en las dehesas y alimentados de pastos naturales, hierbas aromáticas y bellotas.
Los grandes almacenes de referencia en Andorra, Pyrénées, no se olvidan de la carne para los más exigentes: François Fuentes lleva tres décadas al frente de la carnicería y ha modelado una oferta gourmet con las mejores opciones de Francia, como por ejemplo la Bazadaise, ganadora de Festiboeuf 2018. También dispone de una gran variedad de carnes ecológicas de Pirinat, con el certificado ecológico que emite el Consejo Catalán de la Producción Agraria Ecológica (CCPAE).
Y si alguien piensa que el buen pan ha muerto, que vaya a Andorra y pregunte por Jordi Morera, ganador del World Baker 2017 y dueño del establecimiento Espícula, en Pyrénées. Este joven panadero de quinta generación cree que la calidad del pan se basa en la masa madre natural, largas fermentaciones a temperaturas suaves y un trabajo genuinamente artesano, respetando pilares como la proximidad, la sostenibilidad y la ecología.
Su paradigma completa la oferta gourmet con una pastelería y panadería saludable en unos grandes almacenes donde ninguna etiqueta es por azar, todo tiene nombre y apellido y un nivel según el color. Y de ese etiquetado de calidad no se salvan ni los
El cordel azul que recoge cada manojo de la sección de verduras y hortalizas es para destacar el distintivo de calidad de la IGP (indicación geográfica protegida).
Además de seleccionar los mejores productos del mundo, en Pyrénées trabajan para etiquetarlos de manera que todo el arte de su selección no pase desapercibido Ninguna etiqueta es por azar, todo tiene nombre y apellido y un nivel según el color. Y no se salva ni un manojo de 'calçots', que llevan un cordel azul distintivo de la IGP