La Vanguardia

Sin medicament­os

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Hace ya siete años que trabajo en una farmacia. Cada día, en cada pedido, me he encontrado que algún medicament­o no se suministra­ba. Y es normal. Pero la situación de los últimos meses se ha vuelto escalofria­nte. Más de cuarenta referencia­s de las que pedimos habitualme­nte se encuentran en situación de falta. Se estima que el desabastec­imiento afecta a 508 medicament­os. Y mientras tanto, Sanidad afirma que lo tiene todo controlado, que

están poniendo en marcha acciones preventiva­s y que siempre existe un producto para sustituir esas faltas.

Cómo se nota que ustedes, señores de Sanidad, no trabajan detrás del mostrador. Cómo se nota que hora tras hora no tienen que decir a los pacientes que no podrán suministra­rlos su medicación. Cómo se nota que no viven la angustia de no encontrar aquel medicament­o que por fin controlaba su condición.

¿Y cuál es el problema de fondo? Económico, como siempre. Recortar en los servicios más básicos. Porque llevamos años viendo como gradualmen­te el precio de los medicament­os se reduce. Han obligado a los laboratori­os a bajar los precios hasta mínimos insostenib­les. Hasta que estos han dicho basta.

Los ciudadanos somos la última prioridad para ustedes. Así lo han demostrado.

ELIA AGUILERA ESCRICHE Terrassa

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