Fotógrafas en el espejo
El Palau Solterra de Torroella de Montgrí muestra las afinidades en la obra de seis autoras iraníes y seis españolas
¿Qué tienen en común la fotografía contemporánea española y la iraní? Una exposición en el Palau Solterra, el Museo de Fotografía que la Fundación Vila Casas tiene en Torroella de Montgrí, descubre al espectador las similitudes de dos mundos culturalmente alejados y separados por más de 6.000 kilómetros de distancia. La muestra Miradas paralelas Irán-España: fotógrafas en el espejo, que llega a Catalunya tras su paso por ciudades como Madrid, Sevilla, Granada Teherán o Nueva York, la integran 36 imágenes de 12 fotógrafas (seis españolas y seis iraníes) con puntos de coincidencia como la temática, el paisaje, la composición o iluminación, entre otros aspectos.
La elección de las artistas participantes es obra de Santiago Olmo y Zara Fernández, directora de la Asociación Cultural del Mediterráneo Occidental (MED-OCC) cuyo objetivo es tejer puentes a través del arte contemporáneo entre artistas de España y otros países, principalmente de procedencia árabe.
El resultado de la muestra es un diálogo directo entre seis parejas de fotógrafas de periodos muy distintos. De cada autora se muestran entre tres y cuatro imágenes que, como si se tratara de un espejo, permiten captar la visión que cada pareja de creadoras tiene de temas concretos.
Por ejemplo, las costumbres y en concreto las bodas es el tema que une la dupla formada por la Premio Nacional de Fotografía en 1996 Cristina García Rodero (Puertollano, 1949) y Hengameh Golestan (Teherán, 1952) pionera en documentar la vida doméstica y cotidiana de distintas regiones de Irán durante casi 30 años, entre 1974 y el 2000.
A la también Premio Nacional de Fotografía en el 2016 Isabel Muñoz (Barcelona, 1951) y a Gohar Dashti (Ahwaz, 1980) las une su visión por un Irán desértico, devastado y casi irreal. De la primera aparecen imágenes de las serie Bam realizadas después del terremoto que sacudió esa región del sureste iraní en el 2003 y de la segunda, una serie en el que aparecen once mujeres vestidas de negro y sentadas en un largo sofá en medio de la nada.
Un mundo simbólico y onírico en el que aparecen mujeres atrapadas en redes alegóricas es la propuesta de Soledad Córdoba (Avilés, 1977) que suele reflejar en su obra temas como el dolor, la belleza, el silencio, el miedo o la incomunicación y de Shadi Ghadirian (Teherán, 1974), cuya obra tiene como denominador común la reivindicación del papel de la mujer en el mundo musulmán.
La luz y el color de paisajes naturales y arquitectónicos próximos a la abstracción plástica son el punto de unión que existe en la exposición entre la fotógrafa Mayte Vieta (Blanes, 1971) y su homóloga iraní Ghazaleh Hedayat (Teherán, 1979). Por su parte, el retrato de personajes urbanos es el nexo común entre las fotos de María Zarazúa (Madrid, 1974) y la fotoperiodista Newsha Tavakolian (Teherán, 1981) que reflejan conceptos como la soledad o el silencio. Las fotos de Tavakolian, que empezó a trabajar para la prensa iraní a los 16 años retratando la guerra de Iraq y que desde entonces ha publicado en revistas como Time, National Geographic o periódicos como The
New York Times, fueron tomadas en el 2014 entre amigos y vecinos del bloque de pisos donde vivía y muestran la clase media del país. Finalmente, la obra de las fotógrafas Amparo Garrido (València, 1962) y Rana Javadi (Teherán, 1952) coincide en el uso de colores luminosos y utiliza papeles pintados y telas para decorar su obra.
Unas similitudes que la comisaria ha ido encontrando fruto de un arduo trabajo de investigación. “En algunos casos he partido de la autora española y he buscado su correspondencia en Irán y en otras ha sido al revés”, afirma Fernández que destaca la “cantidad de mundos que compartimos a pesar de que geográfica y culturalmente estamos tan alejados”.
Tras su paso por el Palau Solterra de Torroella de Montgrí, donde se puede visitar hasta el próximo 19 de mayo, esta exposición toma rumbo a Lisboa.
Las parejas artísticas se establecen a partir de su visión en temas como el paisaje, las tradiciones o lo cotidiano