Primera mujer síndica, primer gobierno paritario
Xavier Espot se convirtió la semana pasada en el séptimo jefe de Gobierno desde que Andorra separó los poderes legislativo y ejecutivo en 1982. Su elección ha roto varios moldes. Con 39 años, es el jefe de Gobierno más joven de la historia; el primero que todavía no era mayor de edad en el momento de aprobarse la Constitución, en 1993; el primer jefe de Gobierno soltero, sin hijos y gay; el primero que no había concurrido nunca antes a unas elecciones; el primero que se rodea de ministros todos mayores que él, y el primero en nombrar un gobierno paritario: seis mujeres y seis hombres se reparten las carteras del gabinete ministerial.
La octava legislatura constitucional ya empezó, el 2 de mayo pasado, con un punto de inflexión: la elección de la primera mujer síndica (presidenta del Parlamento) en 600 años de historia del Consejo General. Roser Suñé (Andorra la Vella, 1960), que había sido ministra de Educación en el período 2011-2015, fue elegida síndica general con los votos de demócratas, liberales y CC. Le acompaña como subsíndica la también demócrata Meritxell Palmitjavila. Los síndicos, las síndicas en este caso, tienen en Andorra un rol institucional mayor que el que normalmente se atribuye a un presidente de parlamento.
Desde la creación del Consell de la Terra en 1419 hasta la elección del primer Gobierno en 1981, los síndicos fueron a la vez los máximos representantes del legislativo y del ejecutivo. Este peso histórico todavía se nota en la actualidad: los discursos del síndico el Día de Meritxell (8 de septiembre), el Día de Santo Tomás (21 de diciembre) y el Día de la Constitución (14 de marzo) son citas principales del calendario político, y en las reuniones con los copríncipes en el Palacio del Elíseo en París y el Palacio Episcopal de la Seu d’Urgell es habitual que el jefe de Gobierno vaya acompañado del síndico. Amplia presencia femenina en una legislatura en la que la igualdad de género será una cuestión muy presente: la elaboración de una ley de igualdad efectiva entre hombres y mujeres es otra de las prioridades del nuevo Gobierno.