EE.UU. endurece los cargos contra Julian Assange
Estados Unidos ha endurecido los cargos contra el fundador de Wikileaks, Julian Assange, para acusarlo no sólo de pirateo informático sino también de otros 17 delitos que incluyen el de espionaje y revelación de secretos oficiales. Así consta en los documentos del caso presentados ante un jurado de Alexandria (Virginia) y facilitados a los medios por el abogado de la exanalista de inteligencia Chelsea Manning, que cumplió siete años de condena por violar la ley de espionaje. “Assange, los asociados de Wikileaks y Manning compartían un objetivo común para subvertir las restricciones de la ley sobre información clasificada y para difundirla públicamente”, afirma el Departamento de Justicia en el documento de la acusación, que lleva a una nueva dimensión el caso contra Assange, que batalla desde Londres contra la demanda de extradición de emitida por Estados Unidos. Las acusaciones elevan el tono legal y político de la causa contra Assange. Mientras que el presidente Barack Obama, a pesar de su dureza con las filtraciones informativas, renunció a presentar cargos contra el fundador de Wikileaks para evitar un conflicto relacionado con la libertad de prensa y la clasificación de sus actividades, la Administración de Donald Trump ha concluido que las acciones de Assange pudieron causar “un gran daño” a Estados Unidos. Assange “no es ningún periodista”, ha defendido el jefe del departamento de Seguridad Nacional del Ministerio de Justicia estadounidense, Jihn Demers, en declaraciones a la prensa. Los documentos publicados por la plataforma en el 2011 y el 2012 –referidos a las guerras de Irak y Afganistán y el penal de Guantánamo– pusieron en riesgo las vidas de varias personas en China, Irán y Siria, ha asegurado Demers. “No se le acusa simplemente por ser un editor”, ha defendido por su parte el fiscal general del distrito judicial de Virginia, en el que se ha presentado la acusación, Zach Terwilliger.