Dolor y confort
William Fitzsimmons
Lugar y fecha: Centre Artesà Tradicionàrius (19/V/2018) En alguno de sus perfiles sociales, el cantautor estadounidense William Fitzsimmons (1978) destaca a la segunda de cambio su condición de expsicoterapeuta. Y de esto, de terapia, va bastante su último álbum de estudio hasta la fecha, Mission bell. Los temas de esta producción son su personal reacción a una circunstancia nada agradable. En concreto, la separación de su segunda esposa, base de un cancionero que refiere la historia de la destrucción, y posterior reconstrucción desde cero, de un matrimonio de una década.
Hay, por supuesto, mucho dolor en esta crónica, aunque desde el primer instante el artista filtró la cosa con descollante sentido del humor, sembrando más confort que desazón, o una mezcla de ambos, entre el buen número de espectadores que se congregaron en Gràcia.
Con sus tres guitarras, y junto a Adam Landry en la eléctrica y el teclado, Fitzsimmons interpretó, además de temas de Mission bell, piezas procedentes de discos anteriores, como Goodnight aparecido en el 2006, Lions del 2014 y otros. Hubo tiempo también para un tema de nueva escritura (Ready the astronaut, con un bello empaque de tecla), y versiones: el Sweet home Alabama de Lynyrd Skynyrd al ralentí y, como número final, el Everywhere de Fleetwood Mac, desgranado en platea con Landry y los teloneros de la noche, el dúo Jim and Sam.
En cuanto a las piezas del nuevo disco, 17 + forever, Never really mine y, sobre todo, Angela brillaron especialmente en la comparecencia. Una sesión marcada también por un refinado tratamiento instrumental. Mimbres folk aliñados con detalles, vaivenes y sutilidades al servicio de un temario bello por lo melancólico, y hasta solar, del ataque de voz de nuestro inspirado protagonista.