Maragall: “Colau es la última esperanza del unionismo”
Los republicanos esperan una victoria que asumen que será ajustada, pero que les permitirá formar gobierno en solitario El candidato de ERC pide el voto al ciudadano crítico, a los progresistas y a los independentistas
El domingo los votantes tendrán que elegir entre un “alcalde independentista y progresista” o “la opción que quiere poner a Barcelona al servicio de Madrid a través de un pacto PSOE-Podemos”. Así de tajante se expresó ayer el candidato de ERC, Ernest Maragall, en el cierre de la campaña a las elecciones municipales –también de las europeas– en un multitudinario mitin en el CEM de Bon Pastor. Insistió: ERC es la última alternativa a los comunes.
“Colau es la última esperanza del unionismo”, insistió el alcaldable republicano, que mantuvo que si no gana ERC mañana, el gobierno entre Ada Colau y Jaume Collboni está más que asegurado. Un argumento sobre el que también abundó su número dos, Elisenda Alamany, quien tachó a Colau de “mal menor del establisment español”, “el último elemento”, del mismo “después de que Valls, y después de que Collboni”, dijo, no hayan salido como esperaban.
En este sentido, Maragall pidió el voto a los “ciudadanos críticos” con la gestión de la alcaldesa Ada Colau, a los progresistas que quieren “transformar” Barcelona, pero también a los independentistas. “Yo sabré interpretar su voto”, aseguró Maragall. “¡Convirtamos las esperanza en victoria!”, espetó.
El mitin fue el broche final de una última jornada de campaña en la que Maragall, en diferentes momentos, también insistió que su apuesta es gobernar en solitario, alcanzando pactos puntuales con otras formaciones. “Y en cada materia iremos a buscar acuerdos y apoyos”, precisó.
“Devolveremos el Ayuntamiento a la ciudad y con esto está todo dicho. Esto significa ambición, transformación y responsabilidad. Significa ir a por todas y no refugiarnos en ninguna queja. Ir tan lejos como la ciudad quiera que vayamos”, manifestó el alcaldable en el cierre de una campaña en la que el distanciamiento con los comunes ha ido en aumento conforme han ido avanzando los días. La brecha ahora mismo parece insalvable. También con el PSC que, especialmente durante la primera semana de campaña capitalizó las críticas más duras de los republicanos. Al resto de formaciones, sencillamente, se las ha ignorado. Sí que ha habido alguna mención, aunque pocas, a JxCat. Eso sí, desde el primer día se ha asegurado una y otra vez que votar a ERC es el voto útil independentista.
La campaña acaba con la sensación dentro de las filas republicanas que las cosas se han hecho bien, que la victoria será ajustada pero que es posible. “Tenéis cuatro horas para asegurar 4.000 votos más para el domingo”, manifestó Maragall tras comprobar en su reloj que eran las ocho de la tarde. Una campaña que también acaba con un candidato al que se le ha visto disfrutar. “Me siento fuerte, preparado, para ser el alcalde todos vosotros, de cada uno de los ciudadanos de Barcelona”, aseguró Maragall en pleno mitin del Bon Pastor.