División soberanista
Los socialistas han sellado más pactos con posconvergentes que con republicanos
Tras el 26-M, ERC ha arrebatado la alcaldía a los posconvergentes en 26 municipios en los que habían vencido, contando en siete ocasiones con los socialistas para ello.
El acuerdo entre PSC y Junts per Catalunya para la Diputación de Barcelona ha desatado la última tormenta entre las dos familias grandes del independentismo. En las filas de Esquerra Republicana claman en contra del pacto de la Diputación y los acuerdos en los consejos comarcales de sus socios con los socialistas, pero antes sucedió a la inversa con la alianza para echar a JxCat de las alcaldías de Sant Cugat del Vallès y Figueres, entre otras.
El PSC ha sido la cuña que ha facilitado a ambos partidos llevar su pugna por la hegemonía independentista al poder territorial; un agente necesario para su particular batalla, aunque en el Govern intenten “aislarse”. ERC hablaba esta semana de “un antes y un después” y en JxCat constataban que la unidad “ha tocado fondo”.
Tras los comicios del 26-M, los republicanos han arrebatado la alcaldía a los posconvergentes en 26 municipios en los que habían vencido, contando en siete ocasiones con los socialistas para ello. A la inversa ha sucedido siete veces, cuatro de ellas con el apoyo del partido de Miquel Iceta. Hay al menos 32 municipios en los que PSC y JxCat han pactado, la mayoría de ellos para apuntalar alcaldías de los posconvergentes. En el caso de ERC los acuerdos con el PSC se dan en 20 municipios. Los lugares en los que JxCat y ERC coinciden con socialistas son sólo cinco. No obstante, los pactos cerrados en ese ámbito entre los dos socios del Ejecutivo catalán, con ciudades importantes como Lleida, Reus o Manresa, son mayoría, unos cincuenta según los listados que manejan los partidos. Un guarismo similar al de pactos alcanzados por el PSC con ellos.
Algo similar sucede en los consejos comarcales, donde se repite esa dinámica. En cinco en los que se había impuesto ERC –ganó en 19 de 40–, posconvergentes y socialistas se han aliado, por un solo caso en sentido contrario. No todos han sido ya constituidos y hasta la fecha hay sólo dos pactos entre republicanos y socialistas, en Urgell y Terra Alta, por al menos 14 de JxCat con el PSC, en algunos casos con otros actores: Alt Empordà, Alt Penedès, Anoia, Baix Llobregat, Garraf, Ripollès, La Selva, Vallès Occidental, Vallès Oriental, Maresme, Berguedà, Moianès, Tarragonès y Baix Penedès. A esa lista podría sumarse Alt Camp, cuyo consejo se constituye mañana. Además, en el Pallars Jussà y Segarra se intentó sin éxito el antiguo acuerdo sociovergente. Por tanto, habrá más pactos en los organismos comarcales de los posconvergentes con los socialistas que con sus socios de Govern, con quien sólo han sellado seis: Alt Urgell, Baix Camp, Gironès, Osona, Pallars Jussà y Segrià, una lista a la que hay que sumar Cerdanya, donde una parte de ERC se alió con JxCat en el último momento. Además, los independentistas no se han entendido en ninguna comarca de las cinco donde empataron: tres las gobernarán los republicanos y dos, los posconvergentes. En esa tesitura, el PSC desveló el jueves que ERC le ofreció mejores condiciones en algunos territorios en los que habían cerrado ya acuerdos con JxCat, como es el caso de la Selva, el Ripollès o el Alt Empordà.
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