Patrona de patronos digitales
Alicia Richart es la voz de la industria de las telecomunicaciones ante los reguladores de Madrid y la UE
Hemos de estar donde está el regulador, en Madrid y en Bruselas, para que oigan nuestra voz al elaborar la normativa o al impulsar políticas públicas”, resume Alicia Richart sobre su trabajo al frente de DigitalEs, la patronal que agrupa a las grandes empresas tecnológicas españolas. La propia Richart puso en marcha la patronal hace apenas dos años, cuando los grandes operadores, sus proveedores y las grandes consultoras tecnológicas decidieron dejar Ametic,la asociación en la que cohabitaban con las empresas electrónicas y de internet. “De 15 empresas que empezaron el proyecto han pasado a 50, que aportan 35.000 millones de euros al PIB y emplean a 250.000 personas”, recuerda Richart.
Su nombramiento para lanzar DigitalEs rompió moldes en un sector, la tecnología, donde los varones suponen el 70% de las plantillas y el 90% de los directivos. “Se organizó un proceso de selección y el head hunter propuso una terna de candidatos. Mi perfil les pareció el más adecuado pero los 15 socios quisieron asegurarse y tener una reunión previa en la que
presentara un plan estratégico para los primeros 100 días de la asociación”, recuerda. “Yo había elaborado el documento de la Agenda Digital para España, cuando trabajaba como asesora del gabinete del ministro José Manuel Soria, o sea que la estrategia del sector la tenía muy clara” señala.
Richart, barcelonesa de nacimiento, es ingeniera industrial por el Institut Químic de Sarrià. A la tecnología llegó casi por azar. “Mi abuelo tenía una empresa del metal y era ingeniero industrial. Yo no tenía muy claro que estudiar y mi padre me recomendó: haz una ingeniería y un máster y luego haz lo que quieras”. Así lo hizo, con un MBA en Esade y un master en la URL.
Recién licenciada entró a trabajar en Total Fina Elf, que la envió a Lyon, Filadelfia y finalmente a montar una planta en China. “El país era entonces muy diferente, y muy machista. Y el personal local no se creía que una mujer pudiera tener el apoyo de la dirección de la matriz” señala. Pero montó la planta. “Nombré a un equipo de seis ingenieras chinas para ayudarme. Y eso fue clave”. Volvió a España con Accenture como consultora de negocio del área de energía y telecomunicaciones (“No me veía toda la vida montando fábricas por Asia”, señala), primero en Barcelona y desde 2007 en Madrid (“soy de las habituales en el puente aéreo”). Y tras pasar por la administración fue responsable de relaciones institucionales de Cellnex en la salida a bolsa.
Incorporar mujeres al sector es uno de sus retos en DigitalEs. “Estamos estudiando cómo intervenir pronto en la educación para evitar pérdidas de vocaciones” explica, y ella misma colabora como mentora en la asociación Women in Tech. Recomienda a las jóvenes organizarse para que las obligaciones familiares no trunquen su carrera directiva. “hay que empezar la carrera internacional pronto, al salir de la facultad. Algunas firmas, como IBM planifican así ya las carreras de sus empleadas. Porque luego les es más difícil salir y en la vida profesional la trayectoria internacional marca la diferencia”. Esta fue su experiencia, que no logró evitar tampoco los problemas familiares, con un primer matrimonio fallido en solo doce meses incluido.
DigitalEs afronta en su tercer ejercicio los nuevos retos del sector. Como la tasa Google, el impuesto sobre servicios digitales. “Defendemos que se tribute donde se genera el negocio, por supuesto. Pero creemos que la regulación ha de ser global, a nivel de la OCDE o al menos, de la UE. España no puede convertir en una isla fiscal, porque eso desviaría inversiones” señala. Para los operadores el otoño traerá la nueva subasta de espectro radioeléctrico para completar el despliegue del 5G. “Como país hemos de priorizar un despliegue amplio y rápido del nuevo móvil y no querer solo recaudar más”. A su juicio, “el sector ya paga 8.000 millones de euros al año en impuestos y sus ingresos no crecen desde el 2011. No es razonable penalizar a un sector que debe invertir para tirar del crecimiento de la economía”.
Fundó la patronal hace dos años, y los socios han pasado de 15 a 50, que emplean a 250.000 personas
Incorporar mujeres al sector es uno de sus retos en DigitalEs y como mentora en Women in Tech