Un muerto tras recibir una paliza en el Port Olímpic
El gobierno de la alcaldesa Colau solicita una reunión de urgencia con los mandos de los Mossos d’Esquadra para atajar la inseguridad
Una nueva muerte violenta en Barcelona. Un ciudadano de origen chino de unos 25 años falleció la pasada madrugada tras recibir una paliza en los accesos del Port Olímpic. Los investigadores de los Mossos d’Esquadra todavía están buscando a los sospechosos de este brutal crimen.
El nuevo gobierno de la alcaldesa Ada Colau solicitó ayer mismo celebrar una reunión de urgencia con los mandos de la policía de la Generalitat. La sensación de inseguridad ciudadana en la capital catalana es cada día más acuciante. Hablamos del quinto homicidio que se produce en las calles y plazas de Barcelona en apenas un mes.
El último episodio tuvo lugar sobre las cuatro y media de la madrugada del domingo. El relato de los hechos es un tanto confuso. Fuentes cercanas a la investigación y algunos profesionales de esta polémicas zona de ocio nocturno detallan que entonces, en una de las salas de fiesta ubicadas una tras otra en el muelle de Mestral, el paralelo al mar, el ahora fallecido y un amigo suyo se vieron envueltos en una discusión con varias personas con aspecto de proceder de Europa del Este. Al menos así lo indicaban sus acentos.
“Al parecer la discusión continuó después en el exterior del local –abundaron las fuentes–... y al hombre lo apalizaron junto a las escaleras de acceso del puerto que dan a la calle Marina. Allí es donde normalmente, por las noches, se dan la mayor parte de los problemas. La vigilancia es muy escasa. Dicen que estos cuatro o cinco rusos, muy fuertes y fornidos, llevaban toda la noche buscando pelea por la zona, que ya habían tenido algún incidente en otro establecimiento”.
Agentes de los Mossos d’Esquadra encontraron a la víctima aún con vida. Fue trasladada rápidamente al hospital del Clínic. Allí ingresó con muerte cerebral. Falleció al poco tiempo. El acompañante de la víctima resultó herido de una manera leve: recibió un puñetazo en un ojo. Su testimonio será fundamental para esclarecer lo ocurrido.
Fuentes sindicales de la Guardia Urbana denuncian la falta de efectivos destinadas a este lado de la ciudad. “En el Port Olímpic, por las noches, normalmente, apenas puedes encontrar una patrulla, y eso si tienes con suerte... Muchas veces no hay ninguna –afirman en el sindicato Csif–. Lo hemos denunciado en muchas ocasiones. Al parecer los agentes habían sido requeridos en otro punto del puerto y no pudieron hacer nada”. Muchos empresarios de la zona también se quejan de que la plantilla de vigilantes jurados de la infraestructura es también insuficiente.
Albert Batlle, el teniente de alcalde de Seguridad, muy preocupado por lo ocurrido, solicitó ayer mismo celebrar una reunión de urgencia con los mandos de los Mossos d’Esquadra con el objetivo de tratar los problemas de seguridad del Port Olímpic.
De hecho, el ejecutivo municipal lleva varios meses reclamando a la Generalitat que haga efectiva cuanto antes la definitiva cesión de competencias del Port Olímpic. El objetivo del Consistorio es reformar en profundidad esta gran infraestructura y convertirla en un equipamiento de carácter principalmente deportivo, familiar y diurno. Los problemas relacionados con la inseguridad y el incivismo son algunos de los argumentos municipales para emprender esta transformación. La reforma diseñada por el Ayuntamiento ya contempla el cierre definitivo de los locales de ocio nocturno ubicados en el muelle de Mestral, una vez concluya el año que viene su concesión administrativa.
Este homicidio es la quinta muerte violenta registrada en Barcelona durante el último mes