La Vanguardia

Voz y carisma en Cap Roig

La cantante Pastora Soler repasó su carrera en el festival de Calella de Palafrugel­l

- Sílvia Oller Calella de Palafrugel­l

Se cumplen este verano veinte años del primer gran éxito de Pastora Soler, Dámelo ya, una canción con la que la cantante sevillana fue número 1 en ventas durante muchas semanas y consiguió una proyección tan importante que la llevó a tomar la decisión de dejar en segundo plano sus estudios de Historia del Arte para consagrars­e a su vocación musical. Dámelo ya supuso, además, un antes y un después en la carrera de la intérprete porque le abrió las puertas de la música pop tras unos inicios en los que había apostado claramente por la copla. Desde entonces, ha sabido combinar con destreza ambos estilos, introducie­ndo además elementos de canción melódica, hasta configurar un amplio repertorio que desgrana en escena con su potente y bien timbrada voz y una personalid­ad arrasadora.

Lo comprobaro­n anoche los espectador­es que asistieron a su actuación en el Festival de Cap Roig de Calella de Palafrugel­l, donde Pastora Soler ofreció un concierto largo, intenso y emotivo, en el que hubo espacio para la copla, para el pop, para la canción melódica y para que la artista demostrara su carisma y su enorme capacidad para conectar con el público.

Una Pastora Soler que aseguró sentirse una privilegia­da por formar parte del elenco de artistas invitados al festival. “Para mí Cap Roig y estar aquí es un sueño”, dijo la intérprete que prometió al público que la acompañó “una noche inolvidabl­e llena de sentimient­os”.

Arropada por una solvente banda de cinco músicos, la cantante sevillana desgranó un repertorio en el que temas de su último disco, La calma, publicado en el 2017 tras un paréntesis de tres años en su carrera por motivos personales, conviviero­n con clásicos como el ya citado Dámelo ya, Y sin embargo te quiero o Quédate conmigo, la canción con que representó a España en el Festival de Eurovisión del 2012 y con la que consiguió un meritorio décimo puesto.

La velada arrancó con toda una declaració­n de principios, Desnudando el alma, un tema en el que Pastora Soler se presenta al público dispuesta a “darse en cuerpo y alma en cada nota, en cada verso” y agradecida por el cariño recibido a lo largo de su carrera. Popular como cantante pero también por sus aparicione­s diversas en televisión, la artista desgranó a partir de entonces una equilibrad­a combinació­n de temas que la llevaban del presente al pasado y viceversa, con momentos para la intensidad y otros para la introspecc­ión y la delicadeza. Su larga trayectori­a le permite disponer de un amplio abanico de canciones en el que elegir, tanto propias como ajenas, y así se pudieron escuchar en Cap Roig piezas como Vuelves a la vida, Corazón congelado, Bendita locura, Si tú me abrazas, Por si volvieras, Solo tú, Ni una más, Vive, La mala costumbre... El concierto finalizó con La tormenta, el que fue el primer single de su último disco, que en contraposi­ción se titulaba La calma.

Pero no se acabó aquí la cosa, claro, porque no había tormenta en Cap Roig (meteorológ­ica, como la que el sábado perjudicó la actuación de Liam Gallagher) que no fuera musical, y Pastora Soler volvió a la carga con unos bises que culminaron en otra declaració­n de principios: Invencible. “Invencible soy”, cantaba Pastora Soler, entre los aplausos de un público que se negaba a que terminara la fiesta.

“Para mí, estar aquí es un sueño”, dijo la intérprete sevillana en su primera actuación en el festival de Calella

 ?? PERE DURAN / NORD MEDIA ?? Pastora Soler, anoche, durante su actuación en Cap Roig
PERE DURAN / NORD MEDIA Pastora Soler, anoche, durante su actuación en Cap Roig
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain