Sin memoria ni futuro
Vivir dos veces
Dirección: Maria Ripoll Intérpretes: Óscar Martínez, Inma Cuesta, Mafalda Carbonell, Nacho López Producción: España, 2019 101 m. Comedia y drama.
Tras sus realmente memorables actuaciones en películas como El cuento de las comadrejas o Yo, mi mujer y mi mujer muerta, el veterano y siempre admirable actor argentino Óscar Martínez reaparece en las pantallas transmitiendo enorme convicción a la figura de Emilio, un prestigioso catedrático de matemáticas, jubilado y viudo, cuyo rutinario y cada vez más solitario día a día se ve alterado cuando todavía es consciente de que está perdiendo la memoria, los recuerdos, todo. “Las matemáticas me gustan tanto porque son pura lógica”. Una lógica que en su día a día va diluyéndose progresivamente, sin que nada pueda remediarlo. Sumido paulatinamente en el vacío, le asalta el que considera su último deseo: reencontrar a la mujer que fue el primer amor de su juventud.
Con la complicidad de su hija (Inma Cuesta), cada vez más alarmada pero muy colaboradora con él, y de su pequeña nieta (Mafalda Carbonell, hija de Pablo Carbonell), este obsesionado matemático para quien los teléfonos móviles “te fríen el cerebro”, emprenderá un largo viaje de búsqueda de aquel amor que nunca cristalizó. Porque Emilio anhela saber “si ella ha pensado en mí todos estos años”. La cineasta Maria Ripoll afirma que “al recibir el guion, me atrapó enseguida la idea que persigue a su protagonista: antes de empezar a olvidar, quiere recordar”.
Aunque está produciendo reacciones un tanto dispares entre los cinéfilos, Vivir dos veces utiliza a veces elementos emocionales proclives a la simpleza pero sortea con habilidad la superficialidad temática. El trabajo de los intérpretes es también muy valioso, especialmente Óscar Martínez, la siempre eficaz Inma Cuesta, muy recordada y premiada por La novia (2015), así como la pequeña y prometedora Mafalda Carbonell. Capaz de conciliar el toque comercial con el creativo, después de títulos como Rastres de sàndal o No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas, Maria Ripoll aspira otra vez al éxito mezclando con bastante tacto drama y comedia.