Los viticultores del cava alertan del peligro de deslocalización
Huelga contra las grandes bodegas por la fuerte caída del precio de la uva
Los sindicatos agrarios movilizaron ayer a medio millar de viticultores y unos 300 tractores en una jornada de paro de la vendimia y de movilización para protestar contra el precio de la uva y del vino base para vino y cava que pagan las grandes bodegas, mientras alertaban contra un “grave peligro de deslocalización” de la producción. Detuvieron la vendimia y no entregaron uva ante el anuncio de las grandes bodegas de recortar un 28% los precios en origen, volviendo a cotizaciones de 1998.
La movilización llevó a los viticultores a las cavas de Codorniu, Freixenet y Segura Viudas. Además, fueron recibidos en los ayuntamientos de Sant Sadurní d'anoia y Vilafranca del Penedès, y por el presidente del Consejo Regulador de la DO Cava, Javier Pagés, aunque protestaron tirando uva en la entrada de la sede de este organismo. Por la tarde también protestaron contra J. García Carrión (Jaume Serra) y Torres. Algunas bodegas, como Albet i Noya o Vins El Cep, se sumaron al paro, pero muchos otras continuaron la actividad en una jornada que no cambiará, a corto plazo, la situación de bajos precios.
Los representantes de los tres sindicatos convocantes (Unió de Pagesos, JARC y Associació de Viticultors del Penedès) recordaron los problemas que sufre el sector, “ligados al dominio de las compañías elaboradoras que mueven más volumen, que determinan el precio y los parámetros de producción sin ningún compromiso con los productores y el territorio, y pensando sólo en la rentabilidad económica inmediata”. Destacaron que el vino y el cava son productos ligados al territorio, y pidieron la implicación de todos para no correr “un grave peligro de deslocalización”.
Por su parte, la consellera de Agricultura, Teresa Jordà, ha pedido un mayor compromiso del ministro de Agricultura, Luis Planas. En una carta al ministro, Jordà recuerda que hay un desequilibrio generado por la entrada de nuevas superficies gracias a la autorización de nuevas plantaciones y replantaciones por parte del ministerio, “que no ha valorado ni ha tenido en cuenta las recomendaciones del Consejo Regulador del Cava”. Se ha pasado así de 33.000 hectáreas cultivadas a 39.000.
Coincidiendo con la huelga de ayer se dio a conocer que Corpinnat (una escisión de la DO Cava con nueve bodegas de prestigio) y Clàssic Penedès (los espumosos amparados por la DO Penedès) están negociando desde hace medio año constituir una DO para los vinos espumosos del Penedès. Las negociaciones no están cerradas, pero se espera llegar a un pacto antes de final de año.
Corpinnat y Clàssic Penedès negocian la constitución de una nueva DO de espumosos