José A. Marín Ponce
GERENTE DE MAGRUDIS
La empresa cárnica La Mechá, que ha provocado la alerta sanitaria por el brote de listeriosis, sabía desde el mes de febrero que había presencia de la bacteria listeria en alguno de sus lotes y no tomó medidas en el asunto.
La empresa Magrudis sabía desde febrero que algunos de sus productos estaban contaminados por la bacteria Listeria monocytogenes, pese a lo cual no consta que hubiera tomado ninguna medida en aquel momento ni advertido a las autoridades sanitarias o a los laboratorios municipales.
La firma fabricante de La Mechá, origen del peor brote de listeriosis ocurrido en España, que ha causado tres muertes, siete abortos y más de 200 afectados, llevó a los laboratorios Microal, una empresa de control de calidad e investigación especializada en el sector agroalimentario, “dos muestras de carne mechada, con dos fechas de fabricación y caducidad distintas”, señala a este diario Mariano Barroso, gerente de Microal. “Una estaba infectada por listeria y la otra no”, asegura.
“Comunicamos a Magrudis por teléfono y por mensaje electrónico la presencia de listeria en una de las muestras, pero a partir de ahí ya no volvimos a saber nada más del tema”, confirma Barroso. Microal presentó el pasado día 10 de septiembre un informe ante el juzgado de instrucción número 10 de Sevilla, que se encarga de la investigación a Magrudis, y uno de sus responsables prestó declaración ante la Guardia Civil. “A partir de este momento el tema está judicializado y ya no podemos decir mucho más”, indica el gerente del laboratorio.
Barroso señala que el motivo de romper el pacto de confidencialidad y dar a conocer la existencia de ese informe “se debe a que puede haber más mujeres embarazadas que hayan consumido La Mechá mucho antes de que se diera la alerta sanitaria”.
De hecho, la organización de consumidores Facua tiene en su poder la denuncia de una mujer que asegura haber abortado en febrero después de haber consumido carne mechada La Mechá en la fiesta de Nochevieja. También se estudia la denuncia de otra embarazada, presentada ante el Defensor del Paciente, que perdió en un hospital de Madrid a los gemelos que esperaba en el mes de mayo, después de haber comido el producto de Magrudis en Semana Santa. La mujer, sevillana residente en la capital, pasó las vacaciones en Andalucía, donde consumió la carne infectada.
De momento, la juez ha admitido a trámite las denuncias de Facua y del Defensor del Paciente contra Magrudis por los presuntos delitos contra la salud pública y lesiones, aunque no se van a quedar ahí. Facua está reuniendo documentación para que la investigación abarque también los posibles delitos de aborto y homicidio, además de otros que pudieran surgir en la instrucción.
La Junta de Andalucía se personó el jueves en el juzgado como acusación particular contra Magrudis. Según el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, la empresa “no ha hecho los deberes, y nos vimos obligados a activar una alerta sanitaria” el pasado 15 de agosto. En los primeros momentos de la crisis, Aguirre defendió a la empresa y alabó su “colaboración espectacular”.
CONFIDENCIALIDAD
El laboratorio ha roto el secreto porque teme que haya más embarazadas afectadas
POSIBLES NUEVOS CASOS Facua y el Defensor del Paciente han recibido denuncias en Sevilla y en Madrid