No conozco este Sitges
¿Qué hemos hecho con lo bonito que fue Sitges? Actualmente es todo menos bello, y si bien antes disfrutar de su paseo era una delicia, ahora es desagradable, totalmente lleno de mantas y sus productos. En las playas venden de todo, las calles están sucias y la gente se pasea en traje de baño, prenda que creo que es para usar en la playa o la piscina. Aquí nadie pone orden o normas, y la escasa policía local pasea como si no fuera con ellos el mantener una mínima compostura.
Sitges se ha convertido en una ciudad dormitorio para los que viven aquí y en un pueblo donde todo está permitido para los que la visitan y quizá no vuelvan.
M.ª LUISA PALOMO AYMAT Barcelona