El Miniestadi será reciclado en un 80%
El Barcelona se despedirá hoy del Miniestadi a través de un acto oficial y en octubre darán comienzo los trabajos previos para el derribo del recinto, inaugurado en 1982. El club ha descartado una voladura al estilo de la del estadio de Sarrià y ha optado por un sistema de deconstrucción que durará seis meses y posibilitará el reciclaje y aprovechamiento de más del 80% de los materiales. El criterio de sostenibilidad incide también en la fauna y la vegetación. Se ha habilitado un nido especial, con capacidad para 400 individuos, para los murciélagos que habitan y ha comenzado el traslado de una colonia de gatos. Por otra parte, el club ha acordado con el Ayuntamiento la salvaguarda del 85% de los árboles del recinto, que serán transplantados o quedarán resguardados en viveros. Las obras comprenden el desmantelamiento del estadio y el acondicionamiento del terreno hasta febrero del 2020 y afectan también a las instalaciones anexas de la Barça Escola y a la pasarela que conecta el Palau Blaugrana con el Miniestadi, que será retirada en enero. El primer paso de todo el proceso será la retirada de los 15.000 asientos del estadio, que serán donados a entidades deportivas y escuelas que los han solicitado. La parcela quedará preparada para acoger la construcción del nuevo Palau Blaugrana, el Petit Palau, la Pista de Gel y las instalaciones de la Barça Escola, con una estación de autobuses semisoterrada, de acuerdo con la propuesta del equipo HOK+TAC Arquitectes.