Acción pública y soberanías compartidas
Deberíamos empezar por reconocer que vivimos en un contexto de soberanías compartidas y múltiples. El tiempo de los estados nación europeos del siglo XIX y el siglo XX ha terminado. Esta constatación obliga a replantearnos cómo nos gobernamos. El regionalismo europeo y el municipalismo podrían ser dos fuerzas complementarias que transformasen la manera de gobernar en el siglo XXI. Ahora bien, más Europa y más municipio no quiere decir menos Estado (entendiendo Estado como institucionalidad). Significa mayor articulación entre diferentes niveles gubernamentales para
El regionalismo europeo y el municipalismo podrían transformar la manera de gobernar en el siglo XXI
enfrentarse con más eficacia a viejos y nuevos retos que tenemos como sociedades. También implica capacidad de interrelación flexible y en forma de red. En esta madeja de soberanías compartidas y múltiples, la construcción de un confederalismo de naciones o un (verdadero) federalismo asimétrico plurinacional sería coherente con este contexto de gobernanza multinivel. Las diferentes administraciones públicas deben ir aprendiendo a trabajar desde la horizontalidad, aportando cada una de ellas sus fortalezas.