Vino sostenible
Tomàs Cusiné invierte un millón en conversión ecológica y enoturismo
El grupo de bodegas Tomàs Cusiné, presente en las denominaciones de origen Costers del Segre, Conca de Barberà, Montsant y Cava, ha anunciado una inversión de un millón de euros hasta el 2021, destinada a la mejora de la sostenibilidad y también del negocio enoturístico. Ya reciben 60.000 visitas al año en sus cuatro bodegas.
Sólo en su restaurante de Castell del Remei, que únicamente abre los mediodías, sirven 29.000 menús al año. Acaban de inaugurar una nueva tienda de 400 m2 en Castell del Remei, tras restaurar sus singulares paredes de tapia con ayuda de la Generalitat, que ampliarán con un pequeño museo. Castell del Remei es una bodega centenaria en una finca histórica de la denominación de origen Costers del Segre, donde los primeros vestigios de actividad vinícola se remontan al año 1780. Es la bodega más antigua de Catalunya en la elaboración y etiquetaje de vinos finos de crianza.
En el grupo de bodegas han apostado por la conversión a ecológico de sus 150 hectáreas de viñedos. Además, un total de 10 hectáreas ya las dedican a la agricultura biodinámica. También invierten en la mejora del riego o en la reintroducción de fauna salvaje. En los próximos tres años esperan ser autosuficientes energéticamente, con placas solares, en todas las bodegas del grupo (Tomàs Cusiné, Cérvoles, Castell del Remei y Cara Nord).
Este año esperan mantener la facturación del último ejercicio, que alcanzó los 7 millones de euros. Su producción se sitúa en 1,2 millones de botellas. Exportan a una cuarentena de países de los cinco continentes un 40% del total de su producción, principalmente a China, Países Bajos y a Alemania. El 97% de sus ventas en el mercado nacional se concentran en Catalunya. El grupo Tomàs Cusiné suma el 20% del total de la producción de la DO Costers del Segre, y sus vinos se elevan con la Business Class de aerolíneas como American Airlines, British Airways, Finair o Qatar Airways.
El presidente y fundador del grupo, Tomàs Cusiné Barber, destaca que “aún estamos aprendiendo y reorientando nuestro proyecto apostando por la mínima intervención y por variedades autóctonas como la macabeo, la garnacha o la cariñena fermentadas con levaduras autóctonas seleccionadas”.
Fundada en el 2003, la bodega Tomás Cusiné de El Vilosell (Les Garrigues), es el motor innovador del grupo, con la voluntad de “priorizar el trabajo en la viña y en la enología de precisión”. Trabajan exclusivamente con abonos orgánicos, labrando entre cepas y preservando la cubierta vegetal del suelo. Con el fin de evitar la propagación de plagas, sólo se efectúan tratamientos mínimos de azufre y cobre.
Castell del Remei es la bodega más antigua de Catalunya en la elaboración de vinos finos de crianza