Ciudadanos justifica los resultados por el ambiente hostil
La formación naranja queda detrás de la CUP y de Vox en Catalunya
Hace apenas dos años fue la fuerza más votada en las elecciones al Parlament de Catalunya, con más de 1.102.000 votos. Ayer, y aunque en una convocatoria electoral de distinto signo, Ciudadanos quedó en octava posición, con apenas un 18% de los votos obtenidos hace sólo once meses: alrededor de 215.000, por detrás de la CUP y de Vox, que rascaron alrededor de 244.000 y 242.000 aproximadamente.
Octava posición, y 887.000 votos menos. Un drama político. En la sede de la calle Balmes, el ambiente era anoche tenebroso.
Quien dio la cara en tales circuando cunstancias, como el portero al que le han metido siete, fue Carlos Carrizosa, pasadas las once y media de la noche. Lo hizo arropado por el comité ejecutivo del partido en Catalunya y pocos minutos después de que, en Madrid, lo hiciera el presidente del partido, Albert Rivera, y la plana mayor de la formación.
Carrizosa hizo una breve valoración, apuntando a las “circunstancias difíciles” que ha atravesado Cs en esta campaña, en un “entorno polarizado en la política española y en Catalunya sometidos al perpetuo fuego, acoso y señalamiento del separatismo”, con lo que los votantes debieron hacerlo “con valentía”. Entre ellos la propia candidata, Inés Arrimadas, en cuyo colegio se vivieron ayer, dijo Carrizosa, unos incidentes que acabaron con “dos militantes atendidos por lesiones de los radicales”, que en principio iban a presentar denuncia por dichos hechos.
En la línea de Rivera, Carrizosa admitió “los malos resultados, sin excusas”, y apeló a rescatar a aquellos votantes “que en el pasado nos dieron el triunfo en las autonómicas del 2017. Estamos dispuestos a seguir trabajando para recuperar la confianza de todos aquellos que nos han apoyado en algún momento. Desde el centro y la moderación –añadió–, con firmeza contra un separatismo que ha llevado a Catalunya a sus peores momentos”. Carrizosa adelantó acontecimientos
dijo que Ciudadanos se pondrá frente a aquellos actos convocados por el Tsunami Democràtic para los próximos días. “Vivimos momentos muy graves pero Ciudadanos va a seguir plantando cara”, prometió.
Si en las anteriores elecciones generales los de Albert Rivera aportaron cinco diputados en el Congreso, anoche se quedaron en sólo dos (Inés Arrimadas y Fernando de Páramo), con lo que pesos pesados en Catalunya del partido como José María Espejo y Carina Mejías se han quedado fuera del Congreso.