“Tino, Jorge y yo seguimos siendo rebeldes”
Carles Benavent, músico, publica ‘Flamenco leaks’ con Pardo y Di Geraldo
Una de las noticias discográficas del año recién clausurado ha sido la aparición de Flamenco leaks (Mapa Records), la tercera entrega de esa excepcional formación musical integrada por el percusionista Tino di Geraldo, el saxo/flauta Jorge Pardo y el bajista Carles Benavent. Un trío de ases que cruzaron caminos cuando a finales de los años setenta se integraron en el sexteto de Paco de Lucía, es decir, esa bomba musical que revolucionó para siempre el flamenco. El bajista catalán traía tras de sí un currículo nada trillado con grupos como Cranc, Màquina! o Música Urbana, y posteriormente siguió con tesituras flamencas al lado de Camarón de la Isla y también jazzísticas, llegando a tocar con Chick Corea o Miles Davis.
Tras su coincidencia inicial con Paco de Lucía, los tres instrumentistas siguieron sus caminos hasta que acabaron dando vida la sintonía como banda y con dos álbumes: el directo El concierto de Sevilla y el de estudio Sin precedentes.
De eso hace veinte años. Ahora acaban de alumbrar el citado Flamenco leaks, grabado en un estudio asturiano en una semana de intensa improvisación. Ahora lo están presentando por escenarios españoles, aunque de momento no hay fechas catalanas en perspectiva. Benavent explica este retorno a los orígenes.
Había añoranza por volver a grabar, porque tocar junto no han dejado de hacerlo, ¿no?
Es cierto, nunca nos hemos separado, lo que pasa es que ha habido años que no hemos hecho más de tres o cuatro bolos juntos, otros años solo dos. No hemos parado nunca en estos veinte años. En todo esto hay una coincidencia: nuestro primer álbum fue en el 99, el segundo fue en el 2009 y este en el 2019. Cada diez años, hacemos un disco. Lo que pasa es que este Flamenco leaks ha sido un ejemplo de volver a grabar como se hacía antes. Es decir, todos juntos a la vez, de una manera en que todas las cosas iban saliendo espontáneamente en el estudio. Nos metimos una semana en el estudio y no paramos de tocar, todo improvisación. No teníamos nada, ninguno llevaba ni siquiera un esbozo de tema, como hacíamos otras veces. Y claro, de una hora o dos de música que teníamos, tiramos bastante a la papelera y lo tuvimos tano tiempo parado para dejarlo enfriar.
¿Y allí se quedó?
Sí, El disco lo grabamos en el 2012 y el 2013, pusimos titulo a cada uno de los temas y allí se quedó. Y se quedó hasta hace dos años en que decidimos que ya se podía mezclar, añadimos dos temas tipo homenaje, el Soy gitano que popularizó Camarón, y La leyenda, que es una mezcla de tres temas de Chick Corea y Paco de Lucía. Y buscamos una discográfica, pequeña, de Madrid, que no conocía, casi familiar. Lo que a mí me hace ilusión, aparte del disco en sí, es que nos ha servido para renovar el repertorio entero, ahora tenemos un material completamente nuevo para los directos.
Lo que ha implicado que han tenido que ensayar, algo que nunca hacían ¿verdad?
Cierto, pero ahora no ha habido más remedio porque el repertorio es completamente nuevo. Tocamos cada uno igual que siempre, cada uno a su manera, con las discusiones de siempre y con los mismo resultados. Eso sí, yo con el pelo más blanco y algo más de barriga...
Cada vez se venden menos discos pero cada vez hay más directos.¿está de acuerdo?
La crisis se ha notado a la hora de vender discos, sin duda. La gente coge la música por el móvil, la escucha y ya está, o sino la descarga por internet. Pero el directo siempre estará allí, porque el músico es un oficio que transmite emociones, y a la gente le hace falta estas emociones. Te das cuenta de que cuando está tocando a veces estás haciendo una terapia; ahora la gente te da las gracias de otra manera, que más que quedar admirado por la virguería que puedes haber hecho te las da porque les has provocado una cosa más interna, más mística. El directo no está muerto, sino que está más vivo que nunca.
Este disco, lo que hacen ustedes tres en el escenario ¿se puede calificar de flamenco? Siempre he dicho que lo que nos une a los tres es el flamenco, eso es lo único en lo que coincidimos. Uno lo verá más roquero, más jazzero, cada uno tiene su mochila musical, pero cuando estamos juntos coincidimos en el flamenco y en la libertad.
¿En la libertad?
Tanto Tino, como Jorge y como yo, cuando comenzamos en la música tocábamos al revés de lo que estaba de moda. Éramos rebeldes, cada uno en sus historias. Yo con Màquina!, Crac, Música Urbana, cosas que iban contracorriente. Jorge estaba en Dolores y Tino con su banda casi punk. Este salvajismo y el flamenco son los que nos unió.
¿Conservan ese espíritu?
Sí, sin duda, porque ninguno de nosotros ha dejado ser como somos. Nunca.
La música que ustedes hacen, de fusión, ¿es más atípica ahora que cuando comenzaron a finales del pasado siglo?
No, genera la misma reacción que cuando empezamos. Seguimos teniendo la misma rebeldía, no hacemos música de laboratorio para hacer un producto para vender. También hay que decir que lo que nos sale es fusión flamenco porque hemos estado trabajando años con los más buenos del género.
¿Las nuevas generaciones conocen algo de flamenco a través de Rosalía?
Bueno, también puede ser; eso se decía también de Paco de Lucía con Entre dos aguas y , más tarde, de Camarón con Soy gitano.
¿Tiene añoranza de cuando tocaba con Paco de Lucía?
De las personas, sobre todo; de los que se han ido, como Ramón de Algeciras.
¿Y con Miles Davis?
Pienso que lo he soñado, porque fue todo tan rápido, tan fugaz; fue una única actuación que hice con él, dos temas al final de un concierto en el Festival de Montreux.
EL NUEVO DISCO
“Lo grabamos como antes: pura improvisación y todos juntos en el estudio”
EL ESTILO
“Lo que nos sale es fusión flamenco porque hemos trabajado con los mejores del género”