Jaime Botín
Expresidente de Bankinter
Jaime Botín (83), expresidente de Bankinter, ha sido condenado a 18 meses de cárcel y a una multa de 52,4 millones de euros por contrabando de bienes culturales por querer sacar del país el cuadro de Picasso Cabeza de mujer joven .
El primer accionista de Bankinter, Jaime Botín, con casi un 23% del capital del banco, ha sido condenado a pagar una multa de 52,4 millones y a 18 meses de prisión por un delito de contrabando, al tratar de sacar en su barco y vender fuera de España sin permiso el cuadro Cabeza de mujer joven del pintor Pablo Piccaso. Botín, que fue presidente de Bankinter hasta el 2002, ha sido también condenado al pago de las costas procesales, incluidas las de la Abogacía del Estado. Y además, el cuadro volverá a ser propiedad del Gobierno español, en aplicación de la ley de Patrimonio Histórico Español, según recoge la sentencia.
“El banquero podrá eludir el ingreso en la cárcel porque al tratarse de una pena inferior a los dos años por la vía penal y no tener antecedentes, puede evitar su ingreso en prisión”, apuntan fuentes jurídicas.
La sentencia, firmada por la magistrada Elena Raquel González Bayón, del juzgado de lo penal número 27 de Madrid, admite recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Madrid. El despacho de abogados Ramón y Cajal, que defiende a Botín, ya anunció ayer que interpondrá el pertinente recurso de apelación.
El ministerio fiscal y la Abogacía del Estado pedían cuatro años de prisión y más de 100 millones de multa por los hechos.
La sentencia detalla que Botín adquirió la obra original en el año 1977 y que había sido pintada por Picasso en el año 1906. El objetivo inicial del banquero era tenerla en su domicilio de Pozuelo de Alarcón,
en Madrid. Pero, posteriormente, cambió de opinión y trató de venderla en el año 2013 en Londrés a través de la empresa de subastas Christie’s.
El Ministerio de Cultura de España prohibió su salida del territorio español porque “es una de las pocas obras de Picasso del periodo de Gósol, con influencia decisiva en el cubismo y en la evolución posterior de la pintura del siglo
XX”, detalla el fallo. Pese a que se le denegó la solicitud de exportar el cuadro, en julio del 2015, el propietario encargó que la obra artística fuera trasladada en su goleta Adix desde el puerto de València hasta Córcega (Francia), para después ser trasladada en un vuelo privado hasta Ginebra (Suiza).
Los servicios de aduana franceses detectaron la petición de permiso para trasladarlo vía aérea y se pusieron en contacto con el Ministerio de Cultura en España para verificar si se podía mover. Al tener conocimiento de la falta de la preceptiva autorización administrativa para su salida de territorio español, procedieron a su intervención.
El cuadro fue encontrado embalado en la cabina del comandante del barco. Tras dicha intervención, la obra se trasladó a España en agosto del 2015 y quedó depositada en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía de Madrid a disposición judicial.
Los abogados de Botín incluirán en su requerimiento “la inseguridad jurídica”, puesto que el cuadro había salido en 12 ocasiones de los puertos españoles con pleno conocimiento de las autoridades. Y se preguntan: “¿Por qué sólo en la salida del 2015 se le acusa de contrabando?”.
La Fiscalía pedía más de 100 millones de multa y cuatro años de prisión para el expresidente de Bankinter