Barcelona cortará el tráfico en Aragó y otras vías para combatir la contaminación
Los coches dejarán de circular un domingo al mes por la mañana entre Meridiana y la calle Tarragona a partir de marzo
Los coches dejarán de circular por la calle Aragó una vez al mes. Esta vía, por la que se calcula que pasan entorno a 80.000 vehículos cada día, se cerrará al tráfico casi de punta a punta, desde la calle Tarragona hasta la avenida Meridiana. Y eso será así todos los domingos por la mañana, a partir del primer fin de semana del próximo mes de marzo.
El anuncio lo hizo ayer la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, en el marco de su encuentro anual con los asociados del Col·legi de Periodistes de Catalunya, conocido como L’alcaldessa respon. “La calle Aragó es la principal autopista urbana que tenemos en el centro de Barcelona, no podemos tener una autopista en el centro de la ciudad”, apuntó la edil durante el coloquio que mantuvo con el decano de la institución, Joan Maria Morros. “Tenemos que reducir los coches y su centralidad en la ciudad: sí o sí”, insistió Colau.
De ahí la decisión de cerrar al tráfico la calle Aragó y otras restricciones similares que se llevarán a cabo en Gran de Gràcia y Via Laietana (el primer fin de semana de febrero), así como en Creu Coberta y Sants (se cerrará el mismo fin de semana que la calle Aragó. “En total es una medida que aplicaremos en diez calles principales de la ciudad”, manifestó la alcaldesa, que explicó que la medida será gradual (las calles se cerrarán mes a mes) y acumulativa: las calles que se cierran un fin de semana no se volverán a abrir al siguiente.
Fuentes municipales precisaron que aunque en el caso de Aragó el corte al tráfico se producirá el domingo por la mañana, en el resto de vías se llevará a cabo los sábados por la tarde. Se quiere reducir la contaminación, ganar espacio para los peatones, pero también se busca beneficiar a los ejes comerciales.
Una medida que a algunos de los asistentes recordó a la que ya desarrolló en su momento Xavier Trias, cuando optó al final de su mandato cerrar durante los días festivos tramos laterales de la Diagonal y de paseo de Gràcia. “Estamos en unos niveles de contaminación insoportables”, manifestó la edil en una intervención en la que también defendió la aplicación de la zona de bajas emisiones.
Y, además, se comprometió a que cuando acabe el actual mandato entorno del 75% de las calles de la ciudad sean zonas 30.
En la actualidad, apuntó, estas suponen el 50% del total. “Barcelona ha de reducir la velocidad de los coches en la ciudad”, subrayó la edil. “Reducir la velocidad es reducir los atropellos”, añadió.
En este sentido, la alcaldesa manifestó que un atropello a 50 kilómetros por hora tiene un índice de mortalidad del 45%, mientras que si el coche circula a 30 kilómetros por hora se reduce a un 5%.
La alcaldesa también fue preguntada sobre la posible ampliación del aeropuerto de Barcelona a través de la prolongación de la tercera pista, opción que baraja Aena, tal y como avanzó La Vanguardia la semana pasada. “Estamos en plena emergencia climática y tenemos que bajar las emisiones”, señaló la edil que no entró de fondo en la cuestión. Sí que planteó la necesidad de
El gobierno municipal se fija que al final del mandato el 75% de las vías sean zonas 30, frente al 50% actual
mantener una reunión Ayuntamiento, Gobierno central y Generalitat con el aeropuerto y también con el puerto para abordar su futuro y cuestiones medioambientales.
En el acto del Col·legi de Periodistes también se trató la inseguridad en la ciudad –Colau insistió que la situación en la capital catalana no es mala–, la captación de acontecimientos internacionales –hay interés y ambición, aseguró– o el futuro presupuesto del Gobierno central –la alcaldesa cree que lo habrá–. Un coloquio de más de una hora y media que comenzó con el recuerdo emocionado del periodista asesinado David Caminada.