El Gobierno va a penar la apología del franquismo
Exaltar la dictadura será delito en la futura reforma del Código Penal
Tras culminar con éxito el traslado de Francisco Franco del Valle de los Caídos, el Gobierno está dispuesto a dar la “batalla ideológica” contra la ultraderecha de Vox, en un terreno, además, incómodo para el PP y Cs, en lo que los socialistas denominan ahora la “memoria democrática”. La vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, confirmó ayer que Pedro Sánchez cumplirá su compromiso electoral de tipificar como delito en el Código Penal la exaltación y la apología del franquismo. “En democracia no se homenajea ni a dictadores ni a tiranos”, advirtió Lastra, durante el desayuno informativo de Nueva Economía Fórum que protagonizó en Madrid.
“Exhumaremos a las víctimas que aún yacen en las fosas comunes, retiraremos la simbología franquista que aún queda en lugares públicos y reformaremos el Código Penal para que la apología y la exaltación del franquismo sean al fin un delito”, anunció la también portavoz socialista en el Congreso. Y arrancó un prolongado aplauso de los asistentes al acto, en el que estuvo arropada por destacados miembros del Gobierno, desde las vicepresidentas Carmen Calvo y Teresa Ribera hasta los ministros Fernando Grandemarlaska, Juan Carlos Campo, Reyes Maroto o José Manuel Rodríguez Uribes; además de presidentes autonómicos socialistas como el asturiano Adrián Barbón y el extremeño Guillermo Fernández Vara; dos líderes territoriales ya dispuestos al combate electoral, como la vasca Idoia Mendia y el gallego Gonzalo Caballero, y las presidentas del Congreso y del Senado, Meritxell Batet y Pilar Llop.
“Sólo una minoría privilegiada de quienes nunca sufrieron las consecuencias de querer ser libre en una España que no lo era puede mirar a ese pasado oscuro con nostalgia”, denunció Lastra en velada alusión a Vox. Y reclamó la necesidad de mirar al pasado “con memoria y justicia para las víctimas de una dictadura terrible que nos arrancó la libertad y sembró dolor e injusticia”.
Lastra justificó el veto impuesto por el PSOE a Vox en el Congreso, para acorralar al que descalificó como “partido del odio”. “No les ayudemos a tener más resonancia y más influencia que la que merecen”, demandó. Y apeló a la formación de Pablo Casado: “La puerta al extremismo sólo se abre desde dentro y en España es el PP quien tiene la llave”. Así que emplazó a los populares a decidir qué hacer con esa llave: “Puede abrirles las puertas de las instituciones, comprar su agenda, agachar la cabeza cuando así se lo exigen y hasta poner en práctica, como están haciendo en algunas comunidades y ayuntamientos, sus propuestas más descabelladas”. “Yo le digo que cierren esa puerta y tiren la llave, les irá mejor a ellos como partido y nos irá mejor a todos como sociedad”, animó Lastra.
“En democracia no se homenajea ni a dictadores ni a tiranos”, avisa Lastra a los nostálgicos