Sanders gana en Nuevo Hampshire por la división del centro
Buttigieg y Klobuchar desplazan a Warren y Biden
Bernie Sanders ganó las primarias demócratas de Nuevo Hampshire por la atomización del voto centrista. Exponente del ala más izquierdista, Sanders obtuvo el 25,9%, seguido de los centristas Pete Buttigieg (24,5%) y Amy Klobuchar (19,8%). Muy por detrás quedaron Elizabeth Warren y Joe Biden.
La fragmentación del voto de centro permitió anteanoche a Bernie Sanders apuntarse una ajustada pero valiosa victoria en las primarias demócratas de Nuevo Hampshire. Tras ganar en votos también en Iowa, el senador es ahora mismo el favorito en la carrera por la nominación presidencial, pero el desenlace del proceso sigue estando excepcionalmente abierto.
Sanders ganó, pero con menos del 30% del voto (25,9%), mientras que el centrista Pete Buttigieg (24,5%) quedó a sólo 4.000 papeletas de superarlo y Amy Klobuchar (19,8%), también del sector moderado, dio la sorpresa de la noche al alzarse con la tercera posición, dejando muy atrás a Elizabeth Warren (9,3%) y Joe Biden (8,4%). Entre tanto, lejos de Iowa y Nuevo Hampshire, mientras los candidatos de primera hora se pelean entre sí, el multimillonario exalcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, corteja sin pausa a los estados del sur y en especial al voto negro de cara a su estreno en la carrera, directamente en el supermartes del 3 de marzo, cuando votan California, Texas y una docena más de estados con gran peso en la carrera.
Sumados, los votos de los candidatos de centro (Buttigieg, Klobuchar y Biden) superan de lejos a los de los aspirantes más progresistas (Sanders y Warren), pero la división interna del electorado moderado juega a favor del senador por Vermont, que a sus 78 años se ha convertido en el líder incontestable de un potente movimiento impulsado por la energía y las microdonaciones de jóvenes, profesionales con formación universitaria y desheredados del sistema que quieren no sólo ganar a Donald Trump sino cambiar el país de arriba abajo para corregir sus desigualdades. Es su momento, su ahora o nunca.
Al establishment del partido y parte de las bases les preocupa sin embargo su capacidad para ganar unas elecciones nacionales a Trump, que ayer sugirió a los votantes (en algunos estados, los republicanos pueden votar en las primarias demócratas, y viceversa) que elijan a Bloomberg, porque Sanders, dice, le da miedo. Su afición a calificar de socialista radical a cualquier demócrata y atizar a la mínima el miedo rojo puede indicar también que preferiría medirse con Sanders.
A diferencia de Buttigieg, Sanders no tiene rival real en su espacio político. Warren se postuló primero como alternativa al senador, pero sus señales de pragmatismo sobre la reforma sanitaria la llevaron a perder a parte del voto progresista mientras los moderados la seguían viendo como alguien demasiado radical. La senadora y exprofesora de Harvard sigue en la carrera: su apuesta es convencer al electorado demócrata de que es quien mejor puede unir a las dos alas del partido.
Nevada y Carolina del Sur serán la primera prueba a la aseveración de Sanders de que el suyo no es un movimiento marginal de votantes radicales sino “una coalición multigeneracional, multirracial de trabajadores” capaz de atraer a nuevos votantes, de recuperar a demócratas desencantados y de conquistar la Casa Blanca. Una victoria en estos estados le daría un aura de inevitabilidad importante de cara al supermartes, una cita en la que el voto centrista podría dividirse aún más por la irrupción de Bloomberg. Mientras sus rivales y la prensa airean
El senador saca 4.000 votos más que Buttigieg, perjudicado por Klobuchar, otra candidata centrista
episodios pasados que teóricamente podrían privarle del apoyo afroamericano, su campaña ha trabajado por debajo del radar para llegar a los votantes negros de mayor edad, más sensibles que los jóvenes a su mensaje de experiencia y aura de éxito. Bloomberg ha conseguido ya el aval de varios líderes negros y, propulsado por una campaña publicitaria sin precedentes, es ya el favorito del 15% de los votantes.