El CONCA reduce de 10 a 5 los premios nacionales para darles más difusión
Diez años después de su puesta en marcha el Consell Nacional de la Cultura i de les Arts (CONCA) inicia una nueva etapa. A los dos años de su creación, la propia Generalitat le quitó recursos y competencias quedando convertido en un órgano consultivo y evaluador, sin capacidad ejecutora, como sí que tienen otros Council Arts. Y ahora tras salvar una etapa de interinidad, en la que incluso durante la etapa de la consellera Laura Borràs se planteó su disolución, se reinventa tras la renovación de sus siete miembros.
La nueva presidenta, Vinyet Panyella, anunció ayer en la comisión de Cultura del Parlament que se ha reducido de diez a cinco los premios nacionales de Cultura y que pasarán a entregarse en otoño. La parte de presupuesto que se ahorrará en premios se dedicará a la difusión de la obra y trayectoria de los galardonados.
Entre los objetivos anunciados destaca la propuesta de un estatuto del artista, que concrete la normativa laboral, fiscal y de seguridad social de los contratos, y la elaboración de un censo de artistas profesionales. El nuevo CONCA quiere elaborar un programa plurianual de cultura, con un amplio consenso, para que pueda sobrevivir a los relevos institucionales, y un plan interdepartamental entre Educación, Cultura y Universidades, uno de cuyos objetivos será la incorporación de las artes, como materia o competencia transversal en primaria y ESO. También se pondrá en marcha un observatorio cualitativo de las políticas culturales y una mesa entre administraciones. En los próximos meses se presentará un informe sobre la financiación pública de la cultura en Catalunya y su comparación con otros países, otro sobre mecenazgo y un decálogo sobre el modelo de ayudas al sector cultural. Curiosamente, y como si se tratase de una contraprogramación, casi a la misma hora que ayer se presentaba esa nueva etapa, el Institut Català de les Empreses Culturals (ICEC) –que asumió la gestión de parte de las funciones que en sus inicios tenía el Consell–, explicaba su plan de acción para el 2020.
El ICEC anunció que si se aprueban los presupuestos de la Generalitat dispondrá de 63,6 millones de euros, un aumento del 8,5%. Su director, Miquel Curanta, explicó que se abrirá una línea de aportaciones reintegrables para el cómic en catalán (100.000 euros) y de subvenciones para proyectos de realidad virtual (100.000) y creación de podcasts culturales en catalán (120.000). También se recupera una línea de ayuda a las galerías (160.000).