Cierra el Louvre por temor al virus
La cola habitual frente a la pirámide del Louvre, el museo más visitado del mundo, ayer no se movía. Finalmente, los teléfonos de los que esperaban recibieron mensaje oficial. “Ante la imposibilidad de abrir las puertas –se leía en tres idiomas–, le invitamos a escribir a Assistance-billetterie@louvre.fr para obtener el reembolso”. Un delegado sindical explicó a la prensa que, en una asamblea general, los 300 empleados del museo aplicaban ese derecho a dar un paso atrás del que gozan los funcionarios franceses frente a, por ejemplo, una agresión. Se negaban a trabajar sin saber cómo serían protegidos. Porque “la mayor parte de los 30.000 visitantes diarios son extranjeros, en gran parte asiáticos”. El delegado, Chistian Galani, hablaba de “inquietud creciente, por falta de información”.
El Consejo de Ministros del sábado decidió “la cancelación de toda convocatoria, en lugar confinado, de más de cinco mil personas”, pero no hay precisiones del ministro de Cultura. Entre tanto, se anulan reservas para el Mont-saint-michel o el Salón del Libro del 20 de marzo. Nadie sabe qué pasará con la programación de salas de más de 5.000 entradas.
Francia ha registrado 130 casos de infección por coronavirus desde finales de enero. Ayer se registraron los contagios de un niño de un año y su hermano de cinco, al igual que el de su madre, en Estrasburgo, lo que recuerda que el riesgo de los niños de contraer el coronavirus es bajo, pero no nulo.