El Govern tumba el mayor proyecto de autoconsumo con energía fotovoltaica
Nuevo jarro de agua fría para las fuentes renovables en Catalunya. El Departament de Territori i Sostenibilitat ha rechazado el proyecto de construcción de la que estaba llamada a ser la planta fotovoltaica de autoconsumo más grande de Catalunya, promovida por el empresario Joan Vila en Beuda (la Garrotxa).
La ponencia que ha analizado el proyecto ha emitido un dictamen desfavorable a partir de un informe de los servicios territoriales del Departament d’agricultura en Girona. Este informe argumenta que el suelo seleccionado está clasificado como terreno no urbanizable agrario protegido (aunque el lugar no está siendo cultivado).
Además, subraya que la ley de Espais Agraris destaca la importancia de las superficies agrícolas “para la producción de alimentos, la sostenibilidad del sector primario y el equilibrio territorial”. El dictamen justifica también la negativa invocando “la falta de una propuesta y evaluación de alternativas al emplazamiento”. “No se han podido evaluar otros lugares como posibles emplazamientos, por ejemplo, más cercanos” a la industria a la que se prevé suministrar energía (que está a 90 metros). La decisión del Govern ha sido muy mal acogida por los partidarios de fomentar las energías renovables y las entidades promotoras de la declaración de emergencia climática. Todos estos sectores pensaban que las trabas (de todo tipo) que obstaculizan sistemáticamente el impulso de las fuentes renovables desaparecerían con el nuevo decreto de implantación aprobado por el Gobierno catalán. Pero no ha sido así. El Ayuntamiento de Beuda subrayó que el terreno elegido (no urbanizable) es idóneo para acoger equipamientos de interés público, como lo son las instalaciones de producción de energía con fuente renovables.
Joan Vila, un industrial que había promovido la planta para abastecer su industria (LC Paper), ha expresado su sorpresa. “Este proyecto de autoconsumo quería ser un referente, un modelo de transición energética válido para muchas empresas”, indica. La planta fotovoltaica (de 3 MW de potencia en una primera fase) ha sido diseñada para aprovechar la electricidad de manera instantánea y permitiría aportar el 22% del consumo eléctrico de la fábrica. La producción anual prevista equivaldría al consumo de entre 1.200 y 1.500 familias, según Manuel Romero, delegado en Catalunya de Unef (sector fotovoltaico.)
“La ley nos obliga a perder la mínima superficie agraria posible. El dictamen es desfavorable porque no se ofrecen alternativas de emplazamiento, y eso es lo que les pedimos”, señala a este diario Oriol Anson, director general de Desenvolupament Rural. Anson señala que “no estamos en contra del proyecto”, y que no es descartable que si no se encuentra una localización mejor, se acepte este primer lugar.
“Catalunya debe abordar este debate: o mantenemos el mundo rural intocado, con los agricultores en queja permanente, o logramos desarrollar nuevas actividades, industrias y dar un impulso a las fuentes renovables para complementar las rentas en el mundo rural”, dice a este diario Joan Vila.
El promotor esperaba producir en la planta de Beuda el 22% del consumo eléctrico de su fábrica