Seat presenta un ERE temporal para sus 14.800 empleados
El cierre de factorías afecta a casi 47.000 trabajadores de la automoción
La parálisis de la industria automovilística es ya una realidad en España y se va extendiendo por todo el continente europeo. En mayor o menor medida, casi 47.000 trabajadores están afectados en España por el cierre de factorías. En Seat, se confirmó ayer un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) para toda su plantilla, unas 14.800 personas. No tiene duración preestablecida, aunque se calcula que podría prolongarse entre cuatro y cinco semanas.
La planta de Martorell ya estuvo parada ayer y desde hoy también lo están la fábrica de Zona Franca, el centro técnico, la planta de componentes de El Prat y el centro de recambios. La medida se argumenta por “causa de fuerza mayor” y por ello puede aplicarse con carácter retroactivo, independientemente de cuándo lo autorice la Administración. Aunque se solicita para toda la plantilla, no todos los empleados se verán afectados de la misma manera, pues el trabajo de oficinas se puede cubrir en parte con teletrabajo y también pueden realizarse algunas tareas auxiliares. “Seat analizará de forma continua la necesidad de personal en cada centro de trabajo y mantendrá un amplio contingente de personas que permita asegurar la continuidad del negocio durante este periodo y retomar la actividad normal lo antes posible”, dijo la empresa en un comunicado. Lo que sí es seguro es que afectará a los 10.500 empleados vinculados a producción.
Seat se ha comprometido a complementar la prestación de desempleo que garantiza el ERTE hasta alcanzar el 90% del salario bruto. Hoy se seguirán negociando otras mejoras, con la vista puesta en el Consejo de Ministros, que en teoría debe aprobar el llamado “contador a cero”. Esto es, que el tiempo de los ERTE relacionados con el coronavirus no compute a efecto de una futura prestación por desempleo. En caso contrario, el comité reclamará algunas cautelas, como excluir del expediente a los mayores de 55 años, según explicó Rafael Guerrero, de Comisiones Obreras.
De momento, la compañía ha dado permiso retribuido a todas las trabajadoras embarazadas, que cobrarán el 100% de su salario. También ha garantizado el 100% del salario para todos los empleados que tengan que hacer cuarentena por haber estado en contacto con personas con resultado positivo y a aquellos que se encuentren confinados en áreas delimitadas por la Administración, como es el caso de Igualada. Estas personas no se verán afectadas por el ERTE hasta la finalización de la cuarentena o el confinamiento.
Donde no hay acuerdo para un posible ERTE es en Nissan, a pesar de que las líneas de producción se encuentran paradas desde el viernes bajo la fórmula legal de “días de no producción” que permite el convenio. Mientras el comité de empresa defiende la necesidad de enviar a casa a toda la plantilla por razones de salud, la dirección considera que, mientras disponga de suministros, debe continuar la actividad. En la actualidad, no se fabrican vehículos, pero sí algunos componentes para la planta de Nissan en Inglaterra y para Renault. “No podemos permitir que se ponga en riesgo la salud de algunos empleados”, dijo Miguel Ruiz, de Sigen-usoc. Ese mismo temor al contagio obligó ayer a cerrar la factoría de Mercedes Vitoria, la fábrica más grande del País Vasco, después de que los trabajadores protestaran con una sentada en la que denunciaron que no se estaban cumpliendo las medidas de seguridad, informa Jokin Lecumberri.
VW Navarra se encuentra parada, al igual que las cuatro factorías de Renault en España. Ford en Almussafes también ha cerrado y ha suspendido la negociación sobre el plan para despedir a 400 personas.
PSA, con fábricas en Vigo, Madrid y Zaragoza, ha cerrado en toda Europa. FCA las ha parado casi todas y VW está anunciando nuevos recortes productivos.
La dirección y los sindicatos de Nissan discrepan sobre la conveniencia de parar la actividad