Jxcat y ERC chocan en la reforma para hacer plenos telemáticos

Jxcat y ERC quieren poder celebrar plenos por medios telemáticos en una situación excepcional de crisis como la actual. Un fin para el que, sin embargo, los dos socios de Govern plantearon ayer caminos distintos, evidenciando, de nuevo, sus diferencias. Mientras los posconvergentes registraron una propuesta de reforma exprés, los republicanos abogan por un revisión integral.

“No es una reforma estructural, sino ajustada a la crisis actual”, admitía el portavoz de Jxcat, Eduard Pujol, tras constatar que “no hay avances” en la vía habitual. Fuentes parlamentarias apuntan que toda reforma debe llegar por la ponencia conjunta, pero desde Jxcat sostienen que para su plan de mínimos no se requiere esta deliberación. Así, los posconvergentes pretenden esquivar el proceso más lento de la ponencia –constituida en enero de 2019 a raíz de la investidura fallida de Carles Puigdemont– para dar una respuesta “de mínimos e inmediata”, basada en el anexo de un informe de los letrados, a la actual emergencia. Sin perjuicio de que, más adelante, se retome la ponencia.

Por el contrario, desde Esquerra recriminaron a Jxcat haber presentado un texto propio después de haber mantenido contactos con los grupos para consensuar los pasos a dar en la reforma y alertaron de que no se puede “aprovechar la excepcionalidad para priorizar intereses partidistas”. Contra ello, los republicanos piden reactivar la ponencia conjunta para “ir más allá de las medidas de urgencia” por la pandemia y plantean una reforma a fondo que regule “un formato de pleno reducido y telemático” ante “casuísticas objetivas” como catástrofes naturales o crisis sanitarias previa validación de la Mesa y el pleno.

Por su parte, desde la oposición se quiere evitar que se use la emergencia actual para aprobar una reforma deprisa y corriendo, y con intereses partidistas.

Los posconvergentes piden una adaptación exprés a la crisis actual, y los republicanos, una revisión más a fondo