Custodia Moral, la abuela de 85 años conectada a Skype
Mi madre, de leer y escribir, sabe muy poco, estudió sólo un año de pequeña y luego se dedicó a trabajar para sus cinco hijos”, explica Josep Maria Roldán.
Se llama Custodia Moral, vive sola en Vilafranca del Penedès y, si bien “en su móvil no tiene ni Whatsapp”, ha conseguido comunicarse cada día de confinamiento con sus hijos a través de Skype.
“Para mi madre es de gran ayuda ver a toda su familia y para nosotros es una muy buena noticia verla tranquila y feliz”, remarca Josep Maria. “Al principo de todo, le instalamos en casa un ordenador para poder vernos por videollamada”, detalla. “Ella es tan luchadora que un día el ordenador se reinició solo y después de una hora al teléfono, sin que ella sepa nada de ordenadores, logramos poner la contraseña”.
“Vivimos todos, sus cinco hijos, ocho nietos y cuatro biznietos en 20 km a la redonda”, explica Josep Maria, quien detalla cómo es el proceso de videollamada: “Hay una opción de descolgar automáticamente. Primero, la llamamos por teléfono para decirle que se ponga delante del ordenador”. De esta forma, Custodia consigue ver a su familia cada día. “Algunos de mis hermanos no creían que mi madre se pudiese conectar”, pero ahora, “siempre llaman hijos o nietos” para que “no se sienta tan sola”. “Nos da tranquilidad poder verla y a ella vernos a nosotros”, destaca su hijo.
Custodia no sale de casa “para nada”. Una vecina la deja conectarse a su wifi. Solidaridad.